Diario de Castilla y León

Agropal se lanza a la apertura de una red de 100 supermercados en Castilla y León

La cooperativa agroalimentaria abre 50 establecimientos en el medio rural en dos años con productos de cercanía / En 2022 ha creado 200 empleos y mantiene un ritmo de inversión de 15 millones por ejercicio

Supermercado de Agropal en la capital palentina. SGC

Supermercado de Agropal en la capital palentina. SGC

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Santiago G. del Campo
Valladolid

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La cooperativa agroalimentaria Agropal , con sede en Palencia, tiene claro el rumbo y está dando pasos de gigante para crear la primera gran cadena de distribución de Castilla y León . El objetivo, que alcanzará antes de lo previsto, es abrir una red de 100 supermercados en Castilla y León . «Hace menos de dos años les contamos la idea a la Junta de Castilla y León, planteando un plazo de una década. No nos hicieron ni caso, nos tomaron por locos» relata, en respuesta a este periódico, el director general de Agropal, César Reales .

Menos de dos años después la mitad del objetivo está cumplido, con medio centenar de establecimientos a lo largo y ancho de Castilla y León , sobre todo en las provincias de Valladolid, Palencia, León y Burgos. «Llegaremos a ese primer reto de un centenar mucho antes de lo previsto», destaca Reales.

Se trata de crear una red que sirva de base para asegurar la distribución de los productores agroalimentarios de Castilla y Leó n. Y es que, tras el fallido ‘experimento’ de El Árbol, no existe una cadena de distribución castellana y leonesa, al contrario que el resto de las comunidades autónomas. Por otro lado, la filosofía de Agropal se basa en el medio rural. Su objetivo no es tanto abrir supermercados en las grandes ciudades, como en los pequeños pueblos.

«En nuestro grupo tenemos un desarrollo importante en el comercio rural, en los pequeños pueblos de Castilla y León», explica Reales. «Entendemos que si queremos llenar la ‘España vaciada’, lo primero que tenemos que hacer es dotarla de servicios básicos , y el primer servicio básico en cualquier municipio es que haya una tienda donde la gente pueda ir a comprar».

«La gente de los pueblos es gente de una determinada edad, que ya tiene dificultades para manejarse con el coche», añade el director general de Agropal. «Queremos que en su pueblo tengan una tiendecita en la que se vendan los productos de los agricultores, los ganaderos y los pequeños productores que hay en nuestros pueblos. Son muchísimos y nosotros queremos ser el canal para que sus productos lleguen a los consumidores».

Por otro lado, la cooperativa tiene otros centros de trabajo como su fábrica de quesos, la sala de despiece de la carne, el centro de envasado de legumbres, las deshidratadoras… «Vamos a abrir almacenes nuevos para que agricultores y ganaderos tengan un servicio más próximo a sus explotaciones», destaca el director general. 

Las actividades fundamentales que la entidad desarrolla abarcan los cereales, fertilizantes, semillas, carburantes, fitosanitarios, deshidratación de alfalfa y forrajes, ganadería, piensos, hortalizas, tienda de recambios y alimentación y servicios como seguros, fiscalidad, solicitudes de la PAC, contratos de remolacha, ecocarburantes, y un amplio etcétera. Se trata de la cuarta mayor cooperativa de primer grado de España, con una facturación de 430 millones de euros, 8.000 socios agricultores y ganaderos y más de 700 trabajadores , la que más tiene en la Comunidad Autónoma.

«Vamos a una nueva PAC más ecológica, más sostenible, y nosotros tenemos que hacer posible que los agricultores y los ganaderos puedan cumplir con los nuevos requisitos que les plantea» , destaca Roales. «Tenemos que ser esa herramienta que hace posible que la agricultura y la ganadería sigan avanzando en el contexto europeo, con unas normativas cada vez más estrictas, cada vez más difíciles». PRÓXIMAS APERTURAS

Las aperturas de supermercados rurales más inminentes que planea Agropal recorren las provincias de Valladolid, Palencia y Burgos. En la primera de ellas se encuentra ya en obras el de Simancas, al que seguirán los de Villalón y Mayorga. En la provincia palentina el próximo en abrir será Osorno, al que seguirá Herrera de Pisuerga. En Burgos el próximo en abrir sus puertas estará en Melgar de Fernamental.

«Nuestro ritmo de inversión es de 15 millones al año, con una creación de 60 empleos al año» , apunta Reales, «aunque este año ya vamos por 200 puestos de trabajo creados , y eso sin contar con los indirectos de agricultores y ganaderos de los alrededores de estos pequeños supermercados». Los más pequeños de estos establecimientos emplean a seis trabajadores, pero también los hay en los que trabajan varias decenas, como el más grande de los establecimientos, ubicado en la capital palentina junto a la sede de la cooperativa en la calle Francia .

Ante la falta de ayudas de la Administración autonómica, la cooperativa pide al menos que no haya trabas al desarrollo de estos establecimientos. «Hemos pedido a la Junta de Castilla y León que nos permita abrir en los pueblos los domingos, porque los domingos en los pueblos es el día de la semana que tiene más vida», señala el director general de Agropal.

«La gente de Madrid, de Bilbao, de otras comunidades, de Asturias, viene a los pueblos los fines de semana, y necesitamos llenar de vida nuestros pueblos los fines de semana, que si una persona viene de Madrid al pueblo de sus padres o de sus abuelos durante esos días, necesitamos estar abiertos un domingo, para que las producciones del pueblo se las puedan llevar a su casa, a Madrid, Bilbao o Asturias» , añade Reales.

Abrir los domingos en zonas rurales sería «fundamental para llenar la España vaciada, para que los pueblos tengan futuro», asegura. «No todo hay que hacerlo a base de dinero público. Esto no cuesta nada, es gratis. Sencillamente es autorizar a que se haga . Simplemente, con que no nos prohíban abrir, nosotros creamos puestos de trabajo, creamos riqueza».

Agropal se plantea aprovechar la condición de líder en turismo de interior de Castilla y León para «contribuir a mejorar ese turismo y a que los productos de Castilla y León vayan a esas comunidades cuya gente nos visita, para que lo prueben y que luego lo puedan comprar en las grandes cadenas que hay en sus ciudades».

Es el caso, por ejemplo, de establecimientos como el que Agropal ha abierto en la localidad vallisoletana de Peñafiel : «En el caso de Peñafiel –que es un establecimiento mayor porque entendemos que es un pueblo con un potencial extraordinario–, creo que si la Junta nos lo permitiese, poder abrir los domingos significaría que toda la gente que visita las bodegas de la zona no solo se llevaría vinos a su casa, sino que se llevaría los quesos, las legumbres, y la carne de Castilla y León, los embutidos, todo lo que producimos, que es mucho, y de una calidad extraordinaria».

Otro caso similar es el de la localidad leonesa de Valencia de Don Juan , donde hay otro supermercado de Agropal de un buen tamaño. «Es el pueblo por excelencia donde se vienen a ‘secar’ los asturianos», bromea Reales. «Pues bien, que los asturianos se puedan llevar todo lo mucho que hay en León, y lo que hay en Castilla; que se lo puedan llevar para Asturias, igual que cuando nosotros vamos a Asturias nos traemos para acá las producciones extraordinarias que hay allí, es muy importante. Al final de eso se trata. De que nos apoyemos todos», zanja.

«Esta es la realidad. Queremos ser la tienda de los pueblos, no de las ciudades, aunque por supuesto tendremos alguna en núcleos más grandes, porque también la gente de los pueblos vive en las ciudades. Pero fundamentalmente queremos ser las tiendas de los pequeños pueblecitos de Castilla y León y de Cantabria. Tenemos una riqueza impresionante y queremos apoyarla, crear empleo en nuestras tiendas y en los productores que abastecen nuestras tiendas , que la gente pueda vivir allí», explica el director general de Agropal.

Al subrayar este objetivo, Reales rememora la larga andadura de la cooperativa: «Agropal ha ido evolucionando y lo que es hoy no lo era hace 50 años. Yo entré en 1989 y aquí éramos 25 trabajadores y sobraban 10. En este momento somos más de 700, y lo hemos ido construyendo cada año». señala. «Estamos a un ritmo de inversión de 15 millones al año. Al principio no teníamos esta capacidad, ahora sí. Estamos haciendo un centro de envasado de legumbres; una sala de despiece para el envasado de la carne; fábricas de piensos para alimentar a los animales; una fábrica de quesos en Baltanás, con una inversión importantísima», enumera. «Todo eso es fruto de lo que hemos hecho en el pasado. Y en el futuro seremos fruto de lo que hacemos hoy».

En cuanto a la situación que atraviesa ahora el mercado agroalimentario, con un repunte disparado de los precios, Reales lamenta que si los cereales han tenido un precio más alto «se ha traducido en un mayor ingreso para los socios, pero a la vez, los socios han tenido que soportar unos mayores costes en fertilizantes, en combustibles, en energía eléctrica. Al final, no se ha traducido en un beneficio real, ni para la cooperativa ni para los socios. Incluso ha sido superior la subida de precios de los inputs que de las producciones», explica.

«A El Árbol le dio la Junta 25 millones para cerrar, a nosotros cero patatero»

El director general de Agropal lamenta que Castilla y León sea la única Comunidad Autónoma sin una gran cadena de distribución: «Nosotros somos los de aquí, otros quieren aparentarlo»

El director general de Agropal, César Reales. SGC

El director general de Agropal, César Reales. SGC

El director general de Agropal, César Reales, no duda en detallar cuáles son las cosas que «le duelen» de su Comunidad, ni en señalar aquellas políticas autonómicas que le parecen un error. Ingeniero agrónomo, del pueblo segoviano de Montejo de Arévalo, allá donde confluyen las fronteras de Segovia, Ávila y Valladolid, asegura llanamente que donde más aprendió no fue en la Universidad, sino «en el campo, trabajando con mi padre y con mi madre» . Y son las cosas de pueblo, de esa «España vaciada» a las que da más importancia.

«Muchas veces se pone la alfombra a los que vienen de fuera como pasó con los supermercados El Árbol. La Junta les dio una ayuda de 25 millones de euros para después terminar cerrando, y a nosotros nos han dado cero patatero» , señala. «Pues bien, nosotros creamos empleo pero no solo el de la tienda, sino para los agricultores y ganaderos de los alrededores. Esa es nuestra diferencia fundamental. Nuestra identidad es esta: somos los de aquí. Otros quieren aparentarlo, pero nosotros lo somos» .

Y uno de esos asuntos que «le duelen» es la falta de una cadena de distribución agroalimentaria en Castilla y León, una cadena que garantizase la comercialización de los productos de la Comunidad. Es la única autonomía que carece de ella. «Si analizamos las comunidades autónomas, Galicia tiene tres cadenas de distribución extraordinarias, que son Gadis, Froid y Vegalsa; Asturias tiene dos cadenas extraordinarias, como Alimerka y Más y Más; Cantabria tiene su cadena de distribución, como es Semark (Lupa); el País Vasco tiene otras como Eroski y Uvesco; Valencia, a Mercadona; Andalucía y Madrid también tienen…». Sin embargo, «Castilla y León no lo tiene. Nos ha pasado como con el sistema financiero. Lo estamos perdiendo todo y ni siquiera nos damos cuenta de que eso depende de nosotros. Me produce un poco de tristeza», subraya.

«Yo creo que nosotros tenemos potencial, estamos haciendo las cosas bien», opina. Por eso «ya no pido ayudas, pero que no nos pongan trabas. Por ejemplo, me da mucha pena tener nuestra tienda de Peñafiel cerrada los domingos. A los pueblos hay que ayudarlos. Me hace gracia convenios que he visto con empresas para apoyar el comercio en los pueblos, y a nosotros que somos los de los pueblos no nos ha llamado nadie», lamenta.

Uno de los principales objetivos de Agropal es el cierre del círculo de la agroalimentación, que «evidentemente termina en la distribución». «Pero esta es una empresa muy grande. Nosotros tenemos los pies en la tierra. Somos los que pisamos la tierra, los que pisamos las granjas, los que hacemos que los alimentos surjan, que se creen en la naturaleza, y lógicamente corremos todo el camino hasta llegar a los consumidores . A mí me parece que hay un tremendo potencial. Tenemos socios que han decidido poner su granja, y la verdad es que gracias a la cooperativa les está permitiendo crecer y ganarse la vida», explica. «Tenemos socios que llevaban toda la vida con su granja de cerdos y ahora han decidido hacer una sala de despiece y venden su carne de cerdo envasada, enbandejada, y además hacen embutidos, salchichones, chorizos, y eso se vende en nuestras tiendas. A nosotros nos parece que ese es el futuro con los pies en la tierra», añade. TRABAJO

Y es que «Castilla y León no es solo Renault, no es solo Mercadona… Somos miles y miles de personas trabajando aquí todos los días, produciendo alimentos y haciendo cosas buenas para los castellanos y leoneses, para nuestra Comunidad», apostilla. Una producción de alimentos que a veces debería valorarse de una forma más decisiva. «Nosotros no estamos para discutir normativas, ni las estrategias que se llevan en la UE», apunta. «Entiendo que las políticas intervencionistas no tienen cabida en una economía de libre mercado, pero de los productos básicos como son los alimentos, contar con un cierto colchón de seguridad, yo creo que la Unión Europea y España deberían tenerlo. Incluso EEUU lo tiene».

Por eso también llama a cambiar algunas políticas agrarias. «Somos un país con una climatología muy especial, con años muy secos, con otros de cosechas mejores... Lo ideal sería dejar lo que sobre unos años para otros, no dejarlo todo a que el mercado internacional cubra lo que nos falte». Por eso «debería haber apoyo para establecer unos stocks de seguridad para que los mercados no tengan unas fluctuaciones tan fuertes como han tenido» .

Decisiones que también habría que tomar con el agua: «No tiene sentido en una comunidad como Castilla y León que la capacidad para regular un recurso como es el agua sea anual. El Pisuerga en Valladolid de vez en cuando se desborda. Eso es porque no hay un lugar donde poder guardar toda esa agua de los años de muchas lluvias. La solución es muy sencilla: una mayor capacidad de regulación. Tenemos que tener una regulación quinquenal del agua, no podemos tener una regulación anual».

Otros problemas a solucionar en la producción agroalimentaria son, a su juicio, el energético, «que se solventará con la producción de energía renovable , nosotros estamos haciendo muchísimas instalaciones de placas solares o biomasa», explica. «Pero otro gran problema es que se ha hecho mucho esfuerzo para dificultar la producción de alimentos. En España no todo el mundo tiene capacidad para comerse un jamón ibérico. Parece que todo tiene que producirse para la gente que tiene capacidad económica . Tenemos que producir alimentos para los 8.000 millones de personas en el mundo, y tenemos que hacer compatible hacer alimentos sanos y de calidad para todos, y que sean asequibles para toda la población», concluye CON LA VISTA PUESTA EN EL VALOR DEL TRABAJO DEL PRODUCTOR

Cartel de una productora de huevos de Dehesa de Romanos. SGC

Cartel de una productora de huevos de Dehesa de Romanos. SGC

En el marco de esa estrategia de cercanía, los lineales de los establecimientos de Agropal muestran carteles que indican los más variados orígenes de los alimentos , todos ellos de Castilla y León. Rótulos en los que, por ejemplo, se anuncian los huevos ecológicos del ‘Corral de María’, en la localidad palentina de Dehesa de Romanos. El mismo producto lo hay de Fuensaldaña (Valladolid)  o Abia de las Torres (Palencia).  También aparecen numerosos productores en el lineal de las legumbres: «Somos de Torquemada, de Mayorga, de Benavente y de otros 25 pueblos» , señala el cartel expositor. En otro de los lineales de garbanzos y lentejas se muestran puntos de origen como los vallisoletanos Villán de Tordesillas, o Villafrades de Campos.

En el escaparate de los jamones y otros fiambres destaca un cartel con el lema: «Embutidos de Osorno» y en el de los pistachos destaca la marca ‘Pistacyl’ con el aviso: «Soy de Pozal de Gallinas» (Valladolid). No pueden faltar los productos premiados como el queso Cerrato Umami, medalla de oro en los World Cheese Awards y Premio Alimentos de España en 2021.

 

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