La fiesta del Pilar en domingo mengua la ocupación hotelera del puente al 80%

La fiesta de la Virgen del Pilar en domingo no ha sido lo mejor para la ocupación hotelera en Castilla y León, con una previsión que ha caído al 80% en la víspera del puente. Se trata de un registro bastante mejor que un fin de semana normal, pero ni mucho menos anota récord. El motivo está en que mientras si El Pilar cae en día de diario la fiesta es nacional, no son todas las regiones de España las que han cambiado su celebración al lunes. Lo mismo ocurre en los alojamientos de turismo rural, que anotan entre un 80 y un 85% de ocupación.

«Este es un puente muy atípico, porque solo cinco comunidades autónomas han pasado la fiesta del domingo al lunes, que son Andalucía, Asturias, Aragón, Extremadura y Castilla y León», explica, en respuesta a este periódico, la presidenta de la Asociación de Hoteles de Castilla y León, Piedad Sánchez. «Es verdad que hay más movimiento, más que un fin de semana normal, pero tampoco excesivo».

Piedad Sánchez explica que la media de ocupación hotelera en Castilla y León se quedará durante el puente en un 80%, cuando en el caso de ser fiesta nacional «se consigue mucha más». Así, el puente se ha convertido «en poco más que un fin de semana normal», aunque la representante de los hoteleros subraya que El Pilar «funciona bien en las capitales, porque la gente aprovecha para disfrutar de la ciudad, del ocio, de las actividades que estén planificadas. Y luego al final, como es tan extensa Castilla y León y somos vecinos de muchas comunidades, vamos recibiendo a todas».

Las provincias cercanas a Madrid son las que más notan el flujo de reservas, aunque en esta ocasión es Burgos la que ha reportado un mayor nivel de ocupación, cercana al 100%. «Pero si nos referimos a la media autonómica se queda en el 80%», remarca Sánchez.

El puente del Pilar es uno de los primeros tras la entrada en vigor de la normativa que obliga a los portales turísticos de internet a eliminar los anuncios de las viviendas turísticas no registradas. Poco tiempo para hacer un balance sobre la efectividad de la medida. «No lo hemos evaluado. Pero al final son tantas las viviendas de uso turístico ahora que es difícil inspeccionar», lamenta. «Lo bueno es que, en un asunto en el que entran tantas administraciones con competencias, al menos es una medida a nivel nacional».

«Lo mejor sería que hubiera una legislación que se asemejara a la de los hoteles, que pueda haber diferentes productos, pero que al final se les pidiera los mismos requisitos», expone. «El problema que nos encontramos es el de la inspección, que no hay medios para poder inspeccionar a todos, y cuando las hay, generalmente es a establecimientos que ya están en la legalidad».

La presidenta de los hoteleros pone de manifiesto las virtudes que puentes como este tienen para los consumidores, ya que «les permite planificar el viaje con tiempo, sin agobios y también a precios razonables, puesto que cuando hay mucha demanda los precios se disparan».

Las expectativas del sector están, así, puestas en otros puentes. No en el más cercano en el tiempo, el de Todos los Santos, puesto que cae en sábado y se repite el problema. «Va a ser mejor el puente de la Constitución, aunque también hay años que se juntan cinco días en vez de cuatro y se nota mucho más. Ocurre como cuando El Pilar cae en martes, porque en Madrid se suelen coger el lunes y las posibilidades de salir de viaje aumentan mucho más».

Turismo rural

En cuanto al turismo rural, un sector en el que la Comunidad es líder, la ocupación rozará el 85% en este puente del Pilar, según relata el presidente de la Asociación de Empresarios de Turismo Rural de Castilla y León, Luis Chico. «Se trata de una ocupación que no es mala, está un poco en la línea de todos los años», remarca. «Va a ser un puente un poquito light, pues en muchas autonomías tienen solo dos días en muchos casos, pues la gente llega preferentemente de la Comunidad de Madrid».

«Generalmente es gente de nuestra tierra que trabaja en la Comunidad y que viene a pasar estos días con las familias, sobre todo es turismo familiar», apunta. «Las esperanzas prácticamente están puestas en el puente de diciembre. El gran puente, que siempre lo unimos con la Semana Santa y con el puente de agosto, es el de la Constitución, en el que hay siempre muchas expectativas».

Eso sí, como suele ocurrir todos los años por estas fechas, «Nochevieja y Nochebuena ya están prácticamente ocupados al 100%», destaca. «Ya está ocupado casi todo lo que son casas grandes para celebraciones familiares de bastantes personas». Eso sí, se trata de las casas rurales que permanecen abiertas en invierno, ya que hay muchas, alrededor del 30%, que cierran después del puente del Pilar y no abren hasta marzo.

En cuanto a las viviendas de uso turístico y la nueva normativa, Luis Chico añade otra amenaza que se une ahora a la de la competencia desleal: los planes de grandes plataformas turísticas para explotar el turismo rural. «Prometen a las administraciones grandes inversiones para impulsar el turismo, pero es un tipo de turismo que desarraiga a la gente de sus pueblos», advierte Chico.

«Vamos a intentar que esa normativa para controlar los alojamientos no registrados se extienda a plataformas que, como han visto que su cuota de mercado en las ciudades ha desaparecido, intentan implantarse en el mundo rural ofreciendo a los políticos una serie de beneficios, diciendo que va a recuperar viviendas en el mundo rural para que puedan ser utilizadas para hacer que el problema de la vivienda en el mundo rural se solucione. Con esta y otras promesas, quieren abrirse paso», critica Luis Chico.

«Se trata de iniciativas para municipios de menos de 10.000 habitantes, es decir, a Castilla y León nos afectaría a todo el turismo rural. Yo espero que nuestros políticos tomen las mismas decisiones que han tomado en el País Vasco de decir que no, que la esencia del turismo rural pasa por defender lo nuestro», sostiene el presidente de la Asociación de Empresarios de Turismo Rural de Castilla yLeón.

Para combatir contra los planes de esas grandes plataformas se han unido asociaciones de turismo rural de siete comunidades autónomas en un Foro Nacional de Turismo Rural —Asturias, Cantabria, Cataluña, País Vasco, La Rioja, Aragón, y Castilla y León—, «trabajando conjuntamente con la Secretaría de Estado de Turismo, y en concreto con la Dirección General de Políticas Turísticas, para dejar claro que esta gente, lo que quiere es una cuota de mercado que perjudica a los empresarios de turismo rural, que son los que reinvierten en los territorios rurales, los que fijan población y crean empleo, mientras ellos son plataformas que no tienen su domicilio fiscal en nuestro país, con lo cual no pagan los impuestos aquí», concluye.