Diario de Castilla y León

Conversaciones Políticas. Jesús Julio Carnero, alcalde de Valladolid

"Le digo a Puente que yo no soy un tarambaina, no soy Puigdemont, no soy un forajido. Le pido diálogo y voluntad política para el soterramiento"

Ha convertido el soterramiento en su razón de ser como alcalde. Incluso en su coartada para ser senador. No admite que su antecesor, ahora ministro, competente en soterramientos e integraciones ferroviarias, entre otras cosas, se resista a reunirse y dialogar con el que también es el alcalde de su ciudad. No se va a rendir. Promete atacar por tierra, mar y Senado hasta tender ese puente
 

El alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, en un instante de la entrevista. J.M. LOSTAU

El alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, en un instante de la entrevista. J.M. LOSTAU

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Pablo R. Lago
Valladolid

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La entrevista discurre en el despacho de la Alcaldía. Cada aseveración va acompañada de un gesto señalando a la balconada. A la plaza mayor, en un día del invierno gris, donde reside la soberanía de su poder municipal. Aludiendo con el índice a la calle, donde está el mandato ciudadano que le hizo regidor.

Pregunta .- Se supone que el gobierno municipal ya entrado en velocidad de crucero tras los seis primeros meses de rodaje. ¿Qué conclusión saca así de forma esquemática de estos primeros seis meses?

Respuesta .- El hecho que constata esa velocidad de crucero es que hemos a probado el presupuesto, y eso yo creo que es muy importante, por supuesto, para el conjunto de los ciudadanos, pero también para la propia dinámica de la administración. Lo aprobamos el día 29 de diciembre. Y como digo, esa es la expresión más palmaria de esa velocidad de crucero. 

¿Cuál es el resumen que podemos hacer? Bueno, pues en primer lugar, seis meses que están marcados por hechos, extraños a la propia dinámica de la ciudad, como son unas elecciones nacionales que acaban afectando lógicamente, y la propia constitución del gobierno de España, el necesario acople del equipo de gobierno durante este tiempo. Y lo que sí que es importante es la valoración ¿Qué valoración? Pues, una valoración muy positiva. Porque rápidamente nos pusimos manos a la obra con el aspecto significado que nos demandaban los ciudadanos como, todo lo que tiene que ver con la movilidad, diría más bien la inmovilidad que había en la ciudad de Valladolid y que en este momento estamos en el tránsito hacia que haya una movilidad fluida. Pero además que no altera esos grandes objetivos que nosotros también perseguimos, como es el de una movilidad de convivencia, una movilidad en la cual puedan participar los distintos sistemas, por tanto, una valoración positiva y además, muy positiva por un hecho importantísimo.

Hemos, en este tiempo, aparte de adoptar medidas llevado a cabo grandes eventos en la ciudad de Valladolid y en esos eventos que los hemos gestionado nosotros, aunque estaban encargados por el anterior equipo de gobierno, la gestión ha sido una gestión excelente.

P .- Hay otras cosas cosas significativas. Como, por ejemplo, que su antecesor y jefe de la oposición se haya ido de ministro al gobierno de de España.

R .- Yo no me refería a ese tipo de hechos significativos, esos los señala usted así, yo no me refería a eso. Eso es una desgracia para España.

P .- ¿Y que se haya ido la número dos al gobierno también es una desgracia para España?  Es decir, dos ministros de Valladolid.

R .- Pues mire usted, eso lo he dicho yo en varias ocasiones. Es una desgracia que haya un gobierno socialista y que esté en este momento sustentado y sostenido por los aliados o coaligados sobre los que está sostenido, y formar parte de un gobierno de esa naturaleza. Pues es una desgracia para España. Podía haber sido una ventaja para Valladolid. Pero ya estamos viendo que no lo está siendo.

P .- ¿Y que Puente sea ministro de Transportes es una desgracia también para Valladolid?

R .- A mí me gustaría poder decirle lo contrario. Por ahora no tengo ningún hecho constatable que demuestre que no está siendo una desgracia para Valladolid,

P .- Se han ido al gobierno de Pedro Sánchez. Eso ha dejado desarmada a la oposición a ustedes. ¿Eso les alivia?

R .- Mire, es que a mí, como usted comprenderá... la oposición es la oposición. No tiene rostros ni tiene nombres ni apellidos. Y yo a lo que me dedico es a gobernar. No a fijarme en quién está en la oposición.

P .- Un alcalde tiene un rostro en apellido.

R .- Claro que el gobierno tiene un rostro que es el alcalde y otro rostro que son los concejales. Pero en lo que se refiere al gobierno. Y aquí le estoy hablando el que esté la oposición, que tenga un rostro o tenga un apellido uno u otro es insignificante. Y lo que tiene que hacer es cumplir su papel de oposición y de control sobre el gobierno. Por tanto, el que esté una persona u otra, pues yo no lo valoro.

El alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, durante un momento de la entrevista. J.M. LOSTAU

El alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, durante un momento de la entrevista. J.M. LOSTAU

P .- Se le ve a usted notablemente cómodo en ese gobierno de coalición con VOX. No sé si es un mérito de su experiencia en la Junta, tras haber participado en parte de dos gobiernos de coalición o es demérito de los perfiles de sus socios de gobierno.

R .- Los buenos matrimonios lavan los trapos en casa y como buena coalición, nosotros tenemos nuestros más y nuestros menos, pero intentamos, y hasta ahora lo vamos consiguiendo, solucionar todos esos problemas de manera interna. Fruto de una cosa que a mí me parece fundamental y esencial en política, que es el sentido común. Y nosotros estamos luchando todos, tanto VOX como el PP a favor de los vecinos y las vecinas de Valladolid. Y eso es lo que nos mueve. Y cuando yo tengo que hablar algún tema importante y fundamental con la primera teniente de alcalde, Irene Carvajal, por supuesto, para ella, para mí, esa es la primera motivación y eso es lo que nos sustenta. Y eso es lo que debe sustentar siempre a un gobierno, el sentido común, la racionalidad, la prudencia y conseguir el bienestar de los vecinos y vecinos, en este caso de la ciudad de Valladolid

P .- ¿Y lavan trapos muy a menudo o con hacer la colada a la semana llega?

R .- Eso es fruto de la necesidad en un momento determinado, de aclarar determinadas cuestiones, y por tanto, cuando es necesario, lo hacemos mucho o poco. Estamos trabajando bien en aras del entendimiento. De manera lógica, de manera tranquila, de manera sensata. Yo creo que esa es la mejor de las definiciones a día de hoy, del gobierno municipal de la ciudad de Valladolid, la coalición de la sensatez, de la tranquilidad, de ir sacando adelante los temas. Fíjese, respetando todo aquello que viene heredado de la etapa anterior, que sea positivo para la ciudad y modificando todo aquello que entendemos que no es positivo para la ciudad de la etapa anterior, pero poniendo valor también a lo que se ha hecho hasta ahora,

P .- La piedra de toque de su campaña, de su llegada al gobierno, fue el soterramiento. En seis meses no tenemos avances. Estamos como estábamos ¿Esto del soterramiento se va a quedar en el limbo, van a pasar los años y seguiremos debatiendo?  Tiene que tener un punto de inflexión donde la ciudad vaya hacia un lado para avanzar.

R .- Esto tiene que ver con lo que hemos hablado ya antes.

P .- ¿Sobre?

R .- La desgracia de tener un gobierno socialista apoyado por minorías a nivel nacional. Le aclararé algo respecto a esta cuestión. Ahora el soterramiento se va a hacer antes o después. Valladolid tendrá soterramiento. Si estamos, mire usted, dentro de cien años. Pues mire, dentro de cien años, por lo que lo disfrutarán sus nietos, los míos. El soterramiento de Valladolid lo tiene que hacer en este momento. Nosotros vamos a luchar para que el soterramiento en vez de que lo disfruten sus nietos y los míos lo disfrutemos usted y yo, esa es mi lucha, ese es mi objetivo.

Y estoy aquí por eso. Voy a trabajar a destajo. ¿Qué ocurre?, como le decía antes, tenemos una desgracia. Teníamos en perspectiva un posible presidente de gobierno, Núñez Feijóo, que estaba comprometido con el soterramiento de la ciudad de Valladolid. Tenemos un presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, que está comprometido con el soterramiento y un alcalde de la ciudad que está comprometido. Lo teníamos todo en línea. Ocurre lo que acontece, que fruto de una coalición de gobierno, Sánchez elige de ministro a quien tenía que ser el mayor valedor del soterramiento porque le hace ministro de Transportes. Y nada más llegar al ministerio la primera de las desgracias es esa que dice que el soterramiento de la ciudad de Valladolid es inviable económicamente y técnicamente. Empiezo por lo segundo. Usted cree que está a la altura del estado de la ciencia en el siglo XXI.  Por tanto, ¿de qué estoy hablando?, de voluntad política y la voluntad política teniendo un ministro que es de Valladolid, que ha sido alcalde de Valladolid, que no pudo acometer el soterramiento por una serie de circunstancias, las que fuera, que firma un convenio de integración, que él tiene la capacidad de modificar ese convenio de integración cuando, además de los tres socios dos se lo estamos reclamando. Pues, hombre, digo yo, que al menos se debería de imponer el diálogo. No hay nada. Mire usted, por eso es una desgracia para España y para Valladolid, porque no hay nada, no hay, no hay nada.

P .- ¿El ministro no quiere dialogar con ustedes?

R .- El ministro me ha remitido... después de haberle remitido cartas, para que me reciba, a la anterior ministra dos veces, con el actual ministro, una vez...  Me remite a que nos veremos en el Senado, yo como presidente de la comisión de Transportes y Movilidad y el como ministro de Transportes.

P.- ¿A qué se debe esa postura?

R.- No me diga eso. Eso lo pregunta usted a él.

P.- Le pregunto a usted ¿a qué cree que se debe eso?

R.- No, no, es que no creo, yo no creo en estas cosas. Yo lo único que tengo es, mire, voluntad política de iniciar una transformación de la ciudad de Valladolid que en este momento tiene todos los astros en línea para poderla acometer. Lo quiere la Junta, lo quiere el ayuntamiento. Y en el gobierno de España, estando un ministro que es de la ciudad de Valladolid, conoce la realidad de Valladolid y pueda remover esos obstáculos. Y ojo, que es que en los soterramientos hay financiación europea. Se puede invertir el discurso y transitar de la integración al soterramiento.

P .- ¿Sabemos cuánto cuesta el soterramiento?

P .- Si es que lo que tenemos que hacer es hablar de qué soterramos. ¿Soterramos en su totalidad, soterramos parte, soterramos sólo la almendra fundamental. Qué es lo que hay que soterrar? Y a partir de ahí se puede hacer un presupuesto. Los últimos proyectos que se hicieron los hizo el propio ayuntamiento en su día, actualizados, rondaba los 650 millones de euros. 

Póngase en el coste que usted quiera. Pero cómo voy a hablar yo de cifras si todavía no tenemos ni determinado plazos ni longitudes. Hay una cosa que todavía no está suficientemente valorada, que es que lo que nos vamos a gastar en integración apoya y ayuda al soterramiento en el caso de que se sustituya lo uno por lo otro. Hace que ese presupuesto del soterramiento haya que restarle lo que cuesta la integración. Pero lo que es evidente es que el soterramiento de la ciudad de Valladolid se puede acometer. Mire como se ha acometido en su momento el de Cádiz, como está a punto de acabarse en Murcia, como está en buen tránsito en Almería, como se ha hecho la primera fase en Logroño, como se va hacer en Moncada y Reixach, como se va hacer en San Feliú. Fíjese que el ministro de Valladolid va a firmar soterramientos en Cataluña. 

P .- Es que Cataluña es España y él es ministro del gobierno de España.

R .- ¿Y por qué no puede firmarse también en Castilla y León si se pueden firmar en el resto de España?

P .- El ministro y la oposición le ha retado a que, para empezar, renuncie a la integración en el seno de la Sociedad de Alta Velocidad. ¿Estaría dispuesto a poner fin a la integración?

R .- Pero mire usted, que yo no voy a romper el convenio de la integración, que yo al gobierno le he dicho desde el sentido común para los vecinos y vecinos de Valladolid que yo no estoy enajenado. Si yo rompo ahora la integración, que es lo que a él le gustaría, que yo rompiera y tuviera que indemnizar a la sociedad porque hemos firmaba un acuerdo. Yo lo que estoy hablando es de modificar el acuerdo. Mire usted, piense usted y que lo piense. Yo le digo a él (Óscar Puente) que yo soy un castellano, un leonés, yo no soy un tarambaina. Yo no soy  Puigdemont. Yo no soy un delincuente. Yo no salgo en el capó de un coche huyendo. Yo no soy un forajido que es con los que ellos están pactando y están llevando a este país a una situación límite. Eso quiero que le quede claro. Y por tanto lo que yo firmo o lo que yo heredo, que otros han firmado, los respeto, y yo el convenio de integración lo tengo que respetar. Pero yo el convenio de integración lo quiero modificar y quiero transitar hacia una situación que es la del soterramiento. Y yo lo único que pido es diálogo. Lo único que pido es comunicación. Y aquí no valen retos entre otras cosas porque yo no me dedico al juego, me entiende. Y esto no va de juegos ni va de retos ni va de órdagos. Esto va de una realidad que es la de Valladolid, la de esta ciudad. Y esta ciudad puede tener una situación óptima. Si en este momento el ministro cambia su óptica, es tan sencillo como sentarnos a hablar y después de haber hablado seguro que nos ponemos de acuerdo en plazos, nos ponemos de acuerdo en aportaciones, nos ponemos de acuerdo en todo. Pero si se está haciendo en otro sitio. No, no creo que no esté dispuesto a sentarse a dialogar con el alcalde de su ciudad. Bueno.

P .- . Han pasado ustedes de la noche a la mañana, sorprendentemente, de decir que los parkibicis, aparte de un gasto enorme, de momento cuestionable por la escasa ocupación que tienen, a meter 22 más en la ciudad de Valladolid, con otro medio millón de euros. Deberían explicar esta falta de coherencia con lo que prometieron.

R .- No, yo se la voy a explicar. Pues no, no hay tal cosa que usted está diciendo, no hay falta de coherencia. 

P .- Les llamaron ustedes mamotretos y artefactos.

R .- . He llamado mamotreto y artefacto y lo sigo llamando mamotreto y artefacto. Perdone, medio mamotreto ahora y medio artefacto. Porque le digo esto porque resulta que  había 13. Los 22 que hemos colocado es de la mitad de dimensiones que los anteriores. Falta todavía instalar tres. A mí no me gustan nada. Ya se lo digo. No me gustan nada. Pero qué ocurre que nos los financia la Unión Europea al cien por cien y es que estaban ya comprados.

P .- La cuestión no es que le gusten o no, sino de eficacia.

R .- Estaban ya comprados. Si yo no los instalo, tengo que devolverlos. Entonces los hemos instalado.

P .- Han remitido la nota de prensa más larga de la historia municipal alardeando de algo que repudiaban cuando gobernaba el PSOE.

R .- Que no, que no, que no hay alarde que valga, lo que sí que nos hemos convertido es en la ciudad que tiene más aparcabicis de este país. Consigo que tengan la mitad de tamaño. Por tanto, como le decía anteriormente, son la mitad de mamotretos o la mitad de artefactos. Pero es que también lo estético es muy importante en una ciudad. A mi no me gusta nada. Me los he encontrado. He tirado para adelante como otras cosas que me he encontrado y he tirado para adelante. Pero nosotros estamos abiertos a modificar esto. Estamos abiertos a hablar con los vecinos y en aquellos lugares en los que no estén de acuerdo, cosa que no tenemos conocimiento, a día de hoy, lo modificamos, sobre todo si no tiene uso. Nosotros le hemos dado una oportunidad. Hemos establecido una serie de tarifas planas que ha permitido que estemos doblando en este momento el uso, la ocupación de los mismos, que sigue siendo insuficiente, hombre ridícula. Si vemos que un elemento urbano, eh, no funciona, pues habrá que tomar determinaciones.  Si nosotros, lo único que podemos decir es que determinadas cuestiones que nos gustaría cumplirlas más de prisa, pero no lo hemos sometido a la ley, es muy importante cumplir la ley.

P .- Cuándo van a hacer la auditoría en Auvasa que era urgente cuando gobernaba la oposición. Usted calificó a Auvasa de el Tío Tragaldabas por la cantidad de dinero que gastaba, especialmente en infraestrutufas como parkibici.

R .-  La auditoría no dude que se va a hacer. Aquí hay un tiempo que cumplir, que se está analizando viendo por parte de la intervención cómo materializamos ese encargo y se va a hacer. Vamos tranquilamente trabajando. Y lo que vamos consiguiendo es que mejore la ciudad, y mejore el bienestar de los vecinos y vecinas de Valladolid,

P .- En la limpieza, eso es lo que ha encomendado usted a un edil de VOX. Había la promesa, incluso de Vox, de un plan de choque, que todavía no hemos visto. Yo veo la ciudad igual de limpia que la veía. Hay gente que ahora ve contenedores desbordados donde antes no los veía.

R .- Pues, claro, cuando se produce basura al día, pun, se llevan los contenedores. Se lo resumo, yo la quiero ver más limpia. Y voy a trabajar para que esté más limpia.

P .- ¿Y para cuándo plan de choque?

R .- Pero no, si es que el plan de choque lo estamos implementando en el conjunto de medidas. Cuando hemos contratado 90 trabajadores, 35 conductores, estamos procediendo a la renovación de los contratos. Estamos comprando nueva maquinaria,  Es decir, ¿qué le faltaba  esencialmente a ese servicio? Pues personal y maquinaria. Mire, yo sé que la ciudad no está suficientemente limpia. A mí me lo parece. Y yo voy a trabajar porque lo esté. Y el concejal está entregado a cuerpo y alma en esa situación.

P .-  Se generaron enormes expectativas con el desembarco de dos megacompañías, los sectores de automoción que era Switch e Inobat. Los inversores de Switch compraron el terreno. Pero claro,  la realidad económica europea de fabricar autobuses les ha marcado otro ritmo. Y luego lo de Inobat, que suena al cuento de la lechera. Una compañía que tiene un capital social de 3.00o euros, que aspira a cien millones de subvenciones, lo va a tener imposible.

R .- No me ha visto en ningún momento alardear de expectativas. Mire que he hablado de pasado, yo tengo, no, no, no, pero es que quiero quedarlo muy claro. Yo tendré muchas cosas, muchas malas, otras medio pensionistas y otras buenas. Pero lo que nunca voy a hacer  es ser un generador de falsas expectativas o de meras expectativas. Nunca, fíjese que el gobierno regional que trabaja en el ámbito de la llegada de estas dos actuaciones a la ciudad de Valladolid, tampoco ha estado en el ámbito de las expectativas. Estuvieron otros, eso ya pasó.

¿Cuál es la realidad? La realidad es que yo deseo que las dos empresas se instalen. Yo deseo que las dos empresas se instalen y le vayan muy bien porque es darle muchísima continuidad al sector del auto, conocer una ciudad como Valladolid y lo más importante que nosotros, vamos a hacer todo el trabajo que tengamos que hacer para que las dos empresas se instalen. Yo he hablado con los responsables de Inobat, estamos haciendo una interlocución en el caso de Switch, con el embajador de la India  para también seguir hablando con los responsables indios de Switch.

P .- Con ese capital social de 3.000 euros es muy difícil que nadie les conceda cien millones de subvención. Es muy difícil que nadie le conceda mil.

R .- Están trabajándolo. Vamos a dejarles trabajar porque mire usted, si rascáramos en cómo en todos los momentos históricos se han implantado en cualquier lugar del mundo todas las empresas nos llevaríamos las manos a la cabeza. Cómo llegó aquí Renault en su día, cómo llegó Michelin. Pues como hay que llegar de una manera humilde, por tanto yo tengo toda la esperanza en estos proyectos. No tengo ninguna falsa expectativa.

P .- ¿Alberga alguna inquietud sobre el futuro de Renault, alguna a la vista de los cambios que está sufriendo el sector? 

R .- Si me permite, eh, trasciendo el sector de la automoción, es un sector necesario en la ciudad de Valladolid. No digo nada si digo esto pues estar afectadas 20.000 familias, y también no digo nada si digo que es un sector que está en proceso de transición y yo lo único que le puedo decir, porque lo he visto con mis propios ojos y lo he sentido, es que las cosas se están haciendo bien en Valladolid. Lo está haciendo bien Renault, lo está haciendo bien Horse, lo está haciendo bien Iveco y lo está haciendo bien Michelin, lo que supone que todo el entramado satelital en torno a ellas lo están haciendo bien, todas las grandes, pero citaría a algún autónomo a decenas de empresas. Pero qué ocurre que mire usted, tenemos en ciernes una serie de ideas que, como en otros ámbitos, están aconteciendo a nivel europeo, como pueda ser la agricultura, que son estrambóticas. Europa quiere ir a velocidad de cien por hora,  cuando resulta que el resto del mundo va andando en esto me refiriendo a la transición energética, a los procesos de descarburación. Esto es una crítica que hago a Europa con toda la claridad. Solo se puede abordar si hay reciprocidad por parte de los países, porque si no nos van a pasar y nunca mejor dicho, la expresión por la izquierda de los chinos, porque ellos no están en la descarburación están en otro proceso. Por tanto, Europa tiene que ser, por supuesto, muy papista con los ciudadanos y las empresas europeas, con los agricultores y con los ganaderos europeos, pero tiene que ser igual de papista con el resto.

No espere, no, no, no, que acá que saque que no fue suficiente De Los Mozos. Déjeme. Ha sido el arquitecto. Déjeme, déjeme, déjeme acabar. Pero déjeme acabar que le voy a decir una cosa. Entonces, porque esta es una reflexión muy importante, eh? Entonces, eh, Europa, yo creo que no está haciendo bien las cosas en ese sentido. Tan es así que países del rango de Francia, Italia y Alemania en relación a estos tiempos de imposición de esa transición energética, la electrificación, el entrar, la entrada amigo de etcétera le ha puesto peros. El gobierno de España no ha dicho ni mu. El gobierno de España tiene una responsabilidad que no es baladí. Somos la segunda economía automovilística de Europa. Y no ha dicho mu en que la transición tiene que ser una transición ordenada planificada.  

Jesús Julio Carnero. J.M. LOSTAU

Jesús Julio Carnero. J.M. LOSTAU

P .- Dentro de esas herencias de las que ustedes están gozando y que les toca gestionar. Están los Goyas que cuestan a la ciudad más de siete millones de euros. ¿Es un gasto o una inversión para Valladolid?

R .-  Mire usted, eh, en principio es un gasto que yo quiero que al final sea una inversión. Lo vamos a ver. Es una inversión en imagen. Javier Guillén, Vuelta Ciclista, ¿eh? Invertimos un dinero en la Vuelta Ciclista en el mes de septiembre en plenas ferias, fíjese lo que fue ese acontecimiento.La herencia. Fue una herencia, pero la gestión nos correspondía a nosotros de 10.

P .-  Hablando de imagen. A usted le parece normal que alguien desembarque en Valladolid y se encuentre con esa estación de autobuses, casi tercermundista. ¿Urge una estación de autobuses nueva o la vamos a tener en el limbo del soterramiento también?

R .- Lo primero que sí que tengo que decirle es una cosa, ¿qué han hecho durante ocho años los anteriores? Porque ni siquiera lo reivindicaron.

El mismo día que le pido por carta una reunión a la ministra se la pido al presidente de la Junta para hablar del soterramiento y de los temas de Valladolid. A los tres días me recibe el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco. En esa reunión, que fue una reunión larga, la mayor parte de la reunión lo ocupó el tema de la estación de autobuses, que forma parte de las estaciones que tiene que cometer la sociedad alta velocidad y que no tiene nada que ver con integrar o soterrar: La estación se puede hacer soterrada o se puede hacer en superficie. A mí me parece que el lugar donde está ubicada en el barrio de las Delicias o en un punto más cercano es un punto idóneo. Y lo que queremos es que se acometa la estación de autobuses y en ello está el presidente. Y en ello está la consejera. Si que le digo una cosa, no me pregunte por el pasado porque el pasado lo sabemos. No, no. Preguntado, ocho, ocho años ocho, lo pregunto yo, ocho años de mutis. Y ahora cuando llegamos nosotros al día siguiente empiezan a meter mociones, preguntas, ruedas de presa. No sé cómo calificarlo. No lo voy a calificar cuando han tenido la oportunidad de hacer esa revindicación  durante ocho años. 

P .- Dijo usted que ser senador favorecía su labor como alcalde.

R .- Si el ministro no quiere recibirme como alcalde, en el Senado necesariamente me va a tener que ver. Por tanto, eso le beneficia a la ciudad de Valladolid. Porque si resulta que no hay interlocución que valga porque no la hay a día de hoy, ojalá mañana tengamos esa interlocución y retomemos ese diálogo. Pues se producirá. Pero lo que sí que es cierto es que ser senador me permite ser mejor alcalde de la ciudad de Valladolid. No tengo ningún género de duda. Además, estoy cada día más convencido. Me supone un grandísimo esfuerzo, créame, personal y familiar, el tema. Pero le aseguro que ser senador me hace mejor alcalde de la ciudad de Valladolid, entre otras cosas porque veo lo que está pasando, lo que está ocurriendo, y tengo la capacidad de hacer una interlocución.

P .-  El gobierno ha descartado el centro de refugiados de Valladolid ante la indecisión de su gobierno con cesión de la parcela y se lleva los 17 millones de inversión a otra parte.

P .- Eso es la decisión del gobierno. Me resulta cuando menos chocante que el gobierno del señor Sánchez sea tan diligente y rápido para unas cosas y para otras viva en la inacción o, cuando menos, en una injusta e inexplicable lentitud. Ya me gustaría a mí que la prisa con el centro de refugiados de Valladolid lo hubieran tenido con los dos tramos en obras de la Autovía del Duero en Valladolid, que siguen durmiendo el sueño de los justos. Todavía están a tiempo de tener prisa en ese tema. Se lo agradeceremos. Porque mire, la autovía la queremos todos los vallisoletanos. No admite dudas. El centro de refugiados, unos sí y otros, no. Y yo me dedico a gobernar para todos. Eso requiere una reflexión. Gobernar es ejecutar, priorizar, pero también reflexionar, pensar en todos los vecinos. Lo que nunca debe ser gobernar es hacer de la ideología política y nada más que eso. Sánchez con el forajido (Puigdemont) y con Arnaldo (Otegui), yo con los vallisoletanos. 

P .- ¿Cuándo van a empezar los trenes low cost a funcionar? Los de Ouigo que anunció en campaña y cuando ya era alcalde.

R .- Más pronto que tarde, eso es una decisión que corresponde al gobierno de España, precisamente al Ministerio de Transportes. Pero nosotros estamos encantados de que eso se produzca porque es ganar en frecuencias, es ganar en bienestar para la ciudad de Valladolid y para un tránsito que en este momento quizás, fíjese lo que le voy a decir, sea de los mayores imputs que tiene Valladolid, esa cercanía a Madrid, dado que Madrid está acotado y que necesariamente nos va a permitir que llegue muchísimo negocio, llegue muchísima empresa.

Dar a esa posición de cercanía que tenemos con Madrid. Y eso lo facilita el que haya una frecuencia casi de puente, en este caso ferroviario, diario y continuo. Y Ouigo está por la  labor, además, con unos precios estupendos. Y lo más importante que nosotros, nuestra colaboración, va a ser esencial y fundamental desde el punto de vista de todos los aspectos que tengan que ver con el turismo, la cultura, las empresas, etcétera.

P .- Hablemos del aeropuerto. En dique seco. Ryanair, una de las grandes del low coast aéreo, está planificando expandirse en aeropuertos regionales, como hace en Londres. Valladolid está en sus planes. Estamos ante una oportunidad. Las instituciones leonesas van a gastar un dineral para subvencionar vuelos y evitar la agonía de su aeródromo. ¿Van a hacer algo aquí ustedes, sólos o con la Diputación?

P .- El aeropuerto de Valladolid tiene un desarrollo, un recorrido, claro, tanto desde el punto de vista de las mercancías como de los viajeros. Nos queda mucho por andar o por volar, como prefiera. Por tanto aquí ese desarrollo tiene que existir y mucho más desde que el gobierno de España, como competente en este ámbito, tiene entre sus planes reforzar los aeropuertos de ámbito regional, y el de Villanubla cumple perfectamente esa función como todos sabemos. Sin lugar a duda ese es otro motivo más por el que el ministro de Transportes debe recibir al alcalde de Valladolid, de la misma manera que la anterior ministra del ramo recibía al anterior alcalde de la ciudad.

P .- ¿Alberga alguna duda sobre el futuro de Valladolid en el actual contexto económico y político?

R .- Mire usted, si yo en algo creo, pienso y siento es en la capacidad que tienen todos los vecinos y todas las vecinas de Valladolid. Si yo en algo creo, es en Valladolid. Es que es verdad, tenemos muchos proyectos para seguir transformado e impulsado esta ciudad hacia un futuro muy próspero. Estamos en el momento, pero también necesitamos la participación de otras administraciones, como la autonómica y la central.

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