El Procurador del Común pide a la Junta que actúe ante el abandono de edificios del Canal de Castilla

Las harineras de Tamariz de Campos y Dueñas, la antigua vivienda del esclusero de Cubillas de Santa Marta, la almenara que desde Becerril desviaba el agua para los cultivos o la venta donde los marinos reponían fuerzas en este municipio de Palencia son algunos de los edificios que jalonan el Canal de Castilla y sobre cuyo estado de conservación el Procurador del Común acaba de dar una voz de alarma por estar en ruina o abandonados , cuando no por entrañar riesgos para la población. 

En una actuación tramitada de oficio, Tomás Quintana documenta el deficiente estado en el que se encuentran muchas construcciones vinculadas al Canal de Castilla , la gran obra de ingeniería civil declarada BIC en 1991. Muchas de ellas son propiedad de la Confederación Hidrográfica del Duero o de otros particulares que están incumpliendo su deber de conservación. Y ante esa «omisión», reclama a la Junta que diseñe «un plan que permita impulsar la conservación de todos aquellos elementos asociados al Canal de Castilla». Además, «exhorta» a los Ayuntamientos por cuyos términos transcurre el Canal de Castilla «a que ejerzan las competencias que les atribuye la normativa urbanística vigente para garantizar la seguridad y el ornato de los inmuebles, así como la demolición de los que se hallaren en estado de ruina, incidiendo en el cumplimiento del deber de los titulares de adecuar el entorno para garantizar la seguridad y el ornato públicos»

En su resolución, el ‘defensor del pueblo’ recuerda que la Ley de Patrimonio Cultural de Castilla y León obliga a los titulares de estos bienes a conservarlos, pero que también las administraciones públicas pueden ejecutar de manera subsidiaria las actuaciones necesarias para cumplir con ese deber. La normativa «atribuye a la Comunidad de Castilla y León la competencia exclusiva sobre el Patrimonio Cultural ubicado en su territorio», apostilla el Común. «En este marco normativo, procede hacer un llamamiento para que, desde la Consejería de Cultura, Turismo y Deporte, se adopten las medidas llamadas a impulsar el Canal de Castilla como un espacio contextualizado , ejerciendo las competencias que ostenta para que se lleve a cabo la demolición de las construcciones abandonadas e irrecuperables (técnicamente en situación de ruina) así como la conservación y puesta en valor de aquellas construcciones que permiten entender el sentido y la función del Canal», plantea.  

Con todo ello también se facilitará el disfrute de las sendas peatonales y de tránsito en bicicleta que ya existen; se podrá dar cierto uso a algunas instalaciones, las cuales, selectivamente podrían ser destinadas a servir de centros de interpretación que puedan atraer visitantes a los muchos municipios que recorre el Canal de Castilla», continúa. «En definitiva, el Canal de Castilla, a través de medidas como las enunciadas, consideramos que podría  mejorar su condición de referente , que ya lo es, sin parangón por su singularidad y envergadura», añade.

El plan de actuación que propone el Procurador del Común a la Junta debería comenzar por inventariar los bienes sobre los que se debería intervenir, «bien para ser demolidos o para garantizar su conservación», identificando a los respectivos propietarios o titulares . Además, sugiere que desde la Consejería de Cultura «debería proponerse a los ayuntamientos implicados la posibilidad» de proteger aquellos elementos que no estén amparados por la figura BIC incluyéndolos en los respectivos catálogos de sus PGOU o normas urbanísticas. 

Reconoce que el estado ruinoso de algunas construcciones hace inviable ya su restauración y asume que en estos casos lo «procedente y legalmente establecido puede ser la demolición y adecentamiento del lugar». Pero en el resto es obligado recuperarlos íntegramente o conservar sus restos y mantener los entornos en condiciones adecuadas y seguras . 

Para llegar a estas conclusiones, Tomás Quintana hacer un recorrido «sin ánimo de exhaustividad» por varios ejemplos que reflejan «que el entorno del Canal de Castilla requiere de muchas intervenciones» para lograr que refleje su singularidad. Y eso «implica no solo la conservación» del cauce de agua, «sino también todo aquello que sirvió para llevar a cabo aquellas actividades que constituían el fin» de esta ambiciosa infraestructura fluvial que aspiró a unir Segovia con Santander mediante canales, pero que tuvo que conformarse con tres ramales que recorren 207 kilómetros por las provincias de Burgos, Palencia y Valladolid . 

Recuerda Quintana que en 2020 tramitó la queja de un ciudadano relacionada con la antigua fábrica de harinas y central hidroeléctrica a la altura de las esclusas de Viñalta en Palencia , al presentar un estado peligroso de incendios por la maleza acumulada y albergar peligro de caída y ahogamiento para los viandantes. A raíz de aquella actuación, el Ayuntamiento de la ciudad tomó las medidas oportunas para corregirlo. 

Este ejemplo alude a «sólo uno de los muchos elementos que, del mismo modo, se encuentran en un deplorable estado por su falta de mantenimiento y abandono, haciendo desmerecer el entorno del Canal de Castilla, en su condición de Bien de Interés Cultural». 

Otros casos que el Procurador documenta son las construcciones junto al nacimiento del Canal de Castilla en Alar del Rey, en «progresivo deterioro» y las «construcciones derruidas» por la erosión en la ribera del cauce a su paso por Castromocho . 

También en la provincia de Palencia, la almenara de Frómista , pese a mantener prácticamente su integridad, «deja ver cierto descuido» y en Capillas, a la altura de la esclusa número dos del ramal de Campos, «también se puede observar una construcción que ha sucumbido al paso del tiempo». 

La de Capillas es uno de los 19 elementos del Canal de Castilla que figuran en la Lista Roja de la Asociación Hispania Nostra. Su ficha explica que su inclusión se debe a que su estado de «ruina», que «amenaza con el colapso total y desaparición tanto de la fábrica como de la vivienda del esclusero». «Sólo se conservan parcialmente las fachadas, ya que su estructura interior está totalmente derrumbada quedando solo restos de vigas, madera y vegetación en el interior», según consta en la web de Hispania Nostra, antes de añadir que «los entornos se muestran también degradados parcialmente».

Los últimos elementos en sumarse a la Lista Roja son la almenara de Arenales en Becerril de Campos , el puente, la casa y el molino de la esclusa número 9 del Ramal Norte en Ventosa de Pisuerga , el poblado de trabajadores de las esclusas 11 y 12 y la f ábrica de harinas El Batán o La Séptima , ambas en Herrera de Pisuerga, los almacenes y la vivienda de la esclusa número cuatro del Ramal de Campos en Castil de Vel a, la vivienda del esclusero y entornos de la esclusa número cinco del Ramal de Campos en Belmonte, los almacenes del embarcadero en Fuentes de Nava y la mencionada fábrica de harinas y vivienda de Capillas, todas ellas añadidas durante este año 2023.