Ruta del Camino de Santiago
De la Pulchra a Gaudí por el Passo Honroso
La ruta de León a Astorga, donde confluyen el camino francés con la vía de la plata, emana historia, patrimonio y muchas sorpresas
El Camino Francés hacia la tumba del Apóstol en Santiago atraviesa la provincia de León a lo largo de nueve etapas con más de 200 kilómetros que encierran experiencias, naturaleza, y sobre todo otorgan al viandante un sentimiento único en su recta final hacia la meta. Sahagún es la puerta de entrada a la provincia, siendo un punto neurálgico del Camino.
Son muchos los que inician su trayecto en la capital leonesa, a los pies de la Pulchra Leonina, la Catedral de Santa María, cuyo origen se remonta al siglo X cuando durante la época de la reconquista cristiana parte de las antiguas termas romanas del siglo II sirvieron como base del nuevo Palacio Real. El recién nombrado Rey de León Ordoño II que meses antes obtuvo una victoria contra los árabes en la Batalla de San Esteban de Gormaz decidió construir, como gesto de agradecimiento a Dios, la primera basílica de la ciudad sobre su palacio. Se trata de un alto en el camino para los peregrinos de la fe, siendo más de 52.000 los que pasaron por la seo en el año previo a la pandemia, y que se recupera ahora con el Año Santo Jacobeo.
Para acotar el recorrido de estas etapas, cabe destacar dos de ellas las correspondientes al trayecto entre León y Villadangos del Páramos, con 22 kilómetros, y la quinta etapa en la provincia de Villadangos a Astorga, recorriendo otros 26,5 kilómetros. Antes de dar continuidad a la ruta cabe visitar la propia Catedral, la Casa Botines de Gaudí o el Hospital de San Marcos, y recargar fuerzas en el Barrio del Húmedo. La salida por la Plaza de San Marcos, atravesando el río Bernesga encaminará al peregrino hacia el Barrio del Crucero .
La variante del Camino Histórico hacia Villadangos transcurre de forma paralela a la Nacional 120, siendo un trayecto llano entre campos de cereales y caminos de tierra. Un trayecto que conduce a Trobajo del Camino. Existe una pequeña ermita del siglo XVIII, a la derecha de la carretera que lo atraviesa, dedicada a Santiago. Al abandonar el pueblo, el caminante llega a un cerro desde el que se ve, por última vez, la ciudad de León. Se avanza hacia La Virgen del Camino, en cuyo santuario es recomendable realizar una parada para disfrutar del retablo barroco del templo, presidido por la Virgen, es de mediados del siglo XVIII y ya estaba instalado en el antiguo templo, edificado en el siglo XVII. Cuentan que la Virgen se apareció al pastor Alvar Simón y le invitó a lanzar una piedra con su honda, haciéndole prometer que allí donde cayera se edificaría un santuario en su honor. Esta aparición es, según la tradición popular, la que determinó la ubicación del santuario. El discurrir hacia Valverde de la Virgen conducirá hasta San Miguel del Camino antes de avanzar hacia Villadangos del Páramo, el final de la etapa. Allí se conmemora la fiesta patronal el día de Santiago, 25 de julio , y en cuya iglesia parroquial el peregrino puede detenerse a admirar a su entrada dos bajorrelieves policromados que representan, tal y como describe Millón Bravo, la mítica victoria del rey leonés Ramiro I sobre Abderramán II en los campos de Clavijo, gracias a la intervención de Santiago. Asimismo, el retablo central de la iglesia está presidido por una imagen de Santiago Matamoros, con espada y sombrero de tres picos.
La siguiente etapa hacia Astorga es una de las más largas, con 26 kilómetros, y que atesora bastantes desniveles. Desde Villadangos se inicia un recorrido por caminos de tierra hacia San Martín del Camino. A 7 kilómetros, un camino a la derecha nos conduce a Puente de Órbigo y, en 500 metros, nos encontramos cruzando el histórico puente sobre el río Órbigo conocido como el Passo Honroso. El paisaje llano de la meseta nos acompaña hasta Hospital de Órbigo donde queda el antiguo Hospital de Peregrinos, que da nombre a la localidad y, al otro lado de la calle, la iglesia bajo la advocación de San Juan. Señala Luis Pastrana en su guía del Camino que la Ruta Jacobea pasaba antes por Estébanez de la Calzada, una localidad marginada ahora por la N-120.
Unida prácticamente a Puente de Órbigo , esta localidad leonesa recibe su nombre del establecimiento hospitalario para atender a peregrinos que en su día edificaron en este lugar los Caballeros Hospitalarios de San Juan. Los restos del hospital en el pueblo y la iglesia de San Juan evocan este hecho. En Villares de Órbigo también se venera a Santiago y será el inicio de un terreno montañoso hacia Villares de Órbigo, Santibáñez de Valdeiglesias y San Justo de la Vega donde también existió un Hospital de peregrinos.
Astorga será la última parada de esta etapa en un lugar plagado de vestigios romanos donde también confluyen el Camino de Santiago Francés y la Vía de la Plata. Sede episcopal y cabeza de un importante movimiento monacal desde el siglo VII , los 24 hospitales de peregrinos que llegó a tener la convierten en un enclave indiscutible de la Ruta Jacobea. La capital de la Maragatería recibió los títulos de Augusta y Magnífica, en el transcurso de los actos de conmemoración de sus 2.000 años de existencia. A estos títulos hay que sumar los ya reconocidos de Muy Noble, Leal y Benemérita.
Astorga es un monumento en sí misma. Desde que el peregrino atraviesa el recinto amurallado por Puerta Sol, camina al lado del convento de los Padres Redentoristas hacia la antigua Rúa de los Francos, hoy Plaza de San Bartolomé, la ergástula romana, el Ayuntamiento -en el que dos maragatos mecánicos marcan las horas-, el Palacio Episcopal -obra neogótica de Gaudí, en el que se ha instalado el Museo de los Caminos, con una sala, la Jacobea, dedicada al Camino de Santiago- y la Catedral gótica de Santa María, al lado del Hospital de San Juan.
Un lugar para pernoctar y tomar fuerzas para seguir con el Camino porque todavía restarán más de 250 kilómetros para llegar al lugar deseado.