El IPC da un respiro a Castilla y León pero la cesta de la compra 'escapa' a la caída de los precios

El IPC concede un pequeño respiro a los castellanos y leoneses, que ven como en el mes de mayo la inflación se colocó en el 3,2% con respecto al mismo mes del año anterior. Se trata, por tanto, de una cifra mucho más baja que las registradas durante el primer tramo de 2023 y que parece confirmar cierta tendencia a la estabilización por parte de los precios . No obstante, esto no se produce de manera generalizada, ya que la cesta de la compra continúa protagonizando el mayor golpe a los bolsillos de la población , que ve como los alimentos y las bebidas no alcohólicas son ahora un 12,2% más caros que hace un año.

Según los datos publicados este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), Castilla y León iguala la inflación del conjunto de España, con lo que se mantiene en sintonía con buena parte de las comunidades autónomas y deja atrás esos primeros puestos que ocupó meses atrás y que tanto preocupaban a los expertos. Además, los resultados correspondientes al quinto mes del año tienen una causa clara, como es el descenso significativo de los costes de la vivienda y los suministros . En este caso, es un 12% inferior a mayo de 2023, siendo el único apartado que registra un descenso interanual. También son destacables los repuntes del un 8,1% en el grupo de bebidas alcohólicas y tabaco y de un 7,7% en hoteles, cafés y restaurantes.

También fue significativo el aumento de los precios en el grupo de menaje, con un 5,5% más, así como en el de vestido y calzado y hoteles, cafés y restaurantes, que subieron un 3,6%, y el otros, con un 4,5%. Por debajo se encontraron ya los grupos de comunicaciones (2,6%), así como medicina (2,1%) y enseñanza (1,6%). Junto a la vivienda, bajó un 3,2 por ciento en transporte , informa Ical. En la comparativa intermensual, el descenso de la vivienda es el del 0,6%, y que se suma a las caídas del transporte (-1,5%) y del ocio y la cultura (-0,4%). 

Por provincias, los precios subieron en todas en el último año. El mejor comportamiento lo registró Valladolid, con un 2,7%, y el peor, Zamora, con un 4,3% . En el resto, el IPC subió por encima del tres por ciento en Salamanca (3,7%), Palencia (3,5%), León (3,2%), Segovia (3,1%) y se quedó en el tres por ciento de incremento en Ávila y Soria. Por debajo, se situó la provincia de Burgos (2,9%). 

Si se comparan los datos con abril, el alza del IPC también fue generalizada, salvo en Ávila, Valladolid y Zamora, donde cayó un 0,1%. En el 0,4% se colocó Salamanca; en el 0,3%, Palencia; en el 0,2%, Burgos y Segovia, mientras que anotaron un 0,1% León y Soria. 

Al igual que ocurre con el conjunto de la Comunidad, los datos del INE muestran la contraposición entre el encarecimiento de la cesta de la compra y el descenso de los precios relacionados con la vivienda. En el primer caso destaca la subida que sufre Zamora , donde los alimentos y bebidas no alcohólicas se pagan un 14,8% más caros que hace un año, mientras que Ávila presenta el repunte más contenido, del 10,2%.

En cuanto a la caída de la vivienda, el ejemplo más evidente se encuentra en Segovia, donde este grupo se abarató en mayo un 14,5% en comparación con el año anterior. En el lado opuesto aparece Salamanca, que anota la caída más contenida de la Comunidad en este sentido con un 9,7%.