El consumo de carburantes en Castilla y León bajó 100.000 toneladas con relación a antes de la pandemia
El repostaje en la Comunidad creció sin embargo un 3% con respecto a 2021
El consumo de carburantes para automoción es un buen indicador de la marcha de la economía y revela que sigue estando por debajo de los datos de antes de la pandemia. En concreto y según la información que facilita la Corporación de Reservas Estratégicas de Productos Petrolíferos (CORES), durante 2022, en Castilla y León , una autonomía de tránsito en España para viajeros y mercancías, se repostaron 1,96 millones de toneladas de combustibles (gasolinas 98 y 95 y gasóleo A), lo que supone un descenso del 4,5% respecto a los 2,06 millones del año 2019 , es decir, 92.245 menos.
Sin embargo, los datos de 2022, recogidos por Ical, mejoran las cifras de repostaje de un 2021 muy marcado todavía por las restricciones para atajar la pandemia de COVID. En concreto, pese al fuerte crecimiento de los precios de la gasolina y el gasóleo, se repostó en la Comunidad un 3% más, con 57.041 toneladas por encima del dato de ese año, informa Ical.
Por tipo de combustibles , el consumo de gasolina 95, en consonancia con el mercado de vehículos, creció un 7,2% en comparación a 2019, hasta las 292.81 toneladas; y cayó un 25,4% el de 98, la más cara, con 14.436. El gasóleo A siguió siendo el combustible de automoción mayoritario, con un consumo en 2022 de 1.661.219 toneladas, que supone una merma respecto a antes del año COVID del 6%. Si se comparan las cifras de 2022 con las de 2021, el consumo de gasolina 95 aumentó un 10,2%, y el de diésel, un 2%, mientras que el de 98 se desplomó un 17%.
Por provincias , en relación a 2019, la evolución fue desigual , con crecimientos en Palencia (140.955 toneladas), del 5,4%; y en León (366.400), del 3,8%. Por el contrario, descendió en Soria (86.039), un 20,4%; en Zamora (206.408), un 10,3%; en Segovia (86.039), un 8,7%; en Ávila (104.972), un 8%; en Salamanca (292.751), un 7,6%; en Burgos (305.587), un 6,4%; y en Valladolid (337.767), un 0,2%.
En cuanto 2021, los consumos se elevaron en León (366.400), un 13,5% ; en Valladolid (337.767), un 11,2%; en Burgos (305.587), un 7,7%; y en Salamanca (292.751), un 1,2%. Por el contrario, bajaron en Palencia (140.955), un 15,6%; en Segovia (127.751), un 5,6%; en Soria (86.039), un 5,3%; en Zamora (206.408), un 2,4%, y en Ávila (104.972), un 2,1%.
Castilla y León
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Agrario
Por lo que se refiere a los consumos de gasóleo B , el agrario, cabe destacar que agricultores y ganaderos consumieron el año pasado 678.255 toneladas, lo que representa un 5,9% más que en 2019. Sin embargo, en la comparativa con el ejercicio 2021, el campo repostó un 2,2% menos en Castilla y León.
El consumo de gasóleo B bajó en relación a 2019 en Zamora (66.870 toneladas), un 0,7%; y en Burgos (98.754), un 1,4%. Creció en Salamanca (79.227), un 12,4%; en Segovia (64.563), un 12%; en León (123.268), un 11%; en Valladolid (95.935), un 7,4%; en Ávila (46.548), un 5,7%; en Palencia (65.110), un 3,8%; y en Soria (37.979), un 1%.
En comparación a 2021, sólo aumentó en Salamanca, un siete por ciento, y en León, un 0,8%: y se contrajo un 8,1% en Soria; un un 7,5% en Zamora; un 5,5% en Palencia; un 4,5% en Ávila; un 3,1% en Segovia; un 2,8% en Burgos; y un 2% en Valladolid.
Calefacción
CORES proporciona también datos de consumo de gasóleo C, el que se utiliza para calefacciones , cuyo uso se ha restringido enormemente por la escalada de precios y su elevada contaminación. En concreto, el año 2022, se emplearon en la Comunidad, 90.343 toneladas de este tipo de combustible, lo que representa un desplome del 46,8% en comparación a las cifras de 2019; y una merma del 37%, en relación al guarismo de 2021.
Por provincias , mermó su consumo en comparación a 2019, en Soria (2.772), un 73,1%; en Ávila (3.801), un 68,8%; en Palencia (3.454), un 57,4%; en Zamora (3.641), un 55,8%; en Salamanca (13.921), un 52,6%; en Segovia (12.500), un 48,7%; en León (29.249), un 38,5%; en Valladolid (13.239), un 37,1%; y en Burgos (7.766), un 9,1%.
En relación a 2021, el consumo de gasóleo C, disminuyó un 62,4%en Ávila; un 53,1% en Soria; un 45,6% en Palencia; un 44,3% en Salamanca; un 38,1% en Zamora; un 34,8% en León; un 33,9% en Segovia; un 34,8% en León; y un 9,1% en Burgos.
Industria
Por último, el uso industrial de fuelóleo BIA alcanzó el año pasado en Castilla y León, las 27.520 toneladas, lo que representa que se disparó un 156,4% en relación al dato de consumo del año 2019; y también un 157,4% si se pone frente a la cifra del ejercicio 2021.
El consumo de este combustible bajó respecto a 2019, en Soria (12 toneladas), un 96,3%; y Segovia (259), un 22,3%; y se disparó en Zamora (6.703), un 695,3%; en Burgos (7.521), un 473,7%; y en Salamanca (2.670), un 419,6%. Además, aumentó en Palencia (6.363), un 61,1%; en León (3.154), un 57,3%; y en Valladolid (838), un 16,7%. En Ávila no aparece dato de consumo en 2022.
Por último, en comparación a 2019, bajó su consumo un 42,6% en Valladolid; un 16,6% en Segovia; y un 7,4% en Soria; y se elevó un 1.652 por ciento en Burgos; un 630% en Salamanca; un 273% en Zamora; un 54,6% en León; y un 8,1% en Palencia.