Diario de Castilla y León
Acto de posesión de las tres nuevas funcionarias presidido por el concejal de Personal Francisco Blanco y el secretario general del Ayuntamiento, publicada en el perfil de Twitter del consistorio.- AYUNTAMIENTO DE VALLADOLID

Acto de posesión de las tres nuevas funcionarias presidido por el concejal de Personal Francisco Blanco y el secretario general del Ayuntamiento, publicada en el perfil de Twitter del consistorio.- AYUNTAMIENTO DE VALLADOLID

Creado:

Actualizado:

A ESTE PASO alguno va a encumbrar a aquel subdelegado socialista  del gobierno de Soria, de cuyo nombre no quiero acordarme ni me apetece, que un día inauguró un semáforo, con sus tres colores, rojo, ámbar y verde en un pueblo a escasos kilómetros de la capital, camino Burgos. El último de estos episodios de la mediocridad política lo acaba de registrar el Consistorio de Valladolid, con un 7,8 en la escala Richter. El concejal de Hacienda y teniente de alcalde, el jovencísimo todavía Francisco Blanco ‘Pacote’, jugador de rugby en sus tiempos mozos, inauguró el lunes a tres auxiliares administrativas. Se trata de tres nuevas incorporaciones a la plantilla consistorial. Incluso acudió el secretario general de la institución, que debe de ser que mucha tarea no tiene para andar en estas sandeces. Todo por el postureo y para engordar la cuenta de Twitter municipal y lo de las cosas de la prensa. Una de este calibre ya la protagonizó la delegada gubernativa, Virgina Barcones, que inauguró a un funcionario de Educación, teniendo las competencias transferidas las comunidades autónomas, y buena cuenta de ello dimos. Estas hazañas políticas no deben quedar en el ostracismo. Hay que dar buena cuenta de ellas a ver si los estrategas de la comunicación de sus señorías atenúan el nivel y dejan de elucubrar. ¡Tres auxiliares administrativas! El día que descarguen el nuevo palé con las cajas de folios, corte de cinta con arzobispo incluido para bendecir nos va a parecer poco. Incluso debería comparecer en el salón de recepciones del dueño de Galgo, que es el que mejores folios ha despachado toda la vida de dios. Confiemos que este no sea el verano de desasosiegos y mamarrachadas que nos espera. Esto todo es obra de genios de la estrategia comunicativa, empeñados en decirle al emperador desnudo lo mal hecho que está pero lo bien que le sienta el traje. Una azada había que darles. No con una azada, aunque quizás. Tomen nota, ilustres.

tracking