La policía halló en León al depredador sexual huido del FBI al pedir asilo para él y su pareja
Los federales de EE.UU. alertaron en diciembre de 2023 de un vuelo Lima-Madrid en el que el sospechoso podía viajar
La Policía Nacional detuvo recientemente en Astorga a un depredador sexual perseguido por el FBI después de abusar sexualmente de la hija de su expareja, de once años, y después de que los federales estadounidenses le siguieran la pista durante más de 8.000 kilómetros. Sin embargo, la clave para apresar a este individuo fue cuando se trasladó a España y solicitó asilo para él y su actual pareja, lo que permitió a los agentes localizarle y proceder a su arresto.
La investigación de este caso la ha llevado a cabo la Unidad Central de Atención a la Familia y la Mujer de la Policía Nacional, que fue quien finalmente dio con el fugitivo. Todo fue gracias a la colaboración para detectar la llegada de delincuentes sexuales extranjeros a España, ya que el FBI detectó un vuelo el pasado 13 diciembre de 2023 entre la capital de Perú, Lima, y Madrid, en el que podía viajar el detenido.
Según fuentes de la investigación consultadas por este periódico, fue esa conexión aérea la que puso a la Policía Nacional sobre la pista del depredador sexual, y a medida que realizaban pesquisas descubrieron que había solicitado asilo en la Brigada de Extranjería de León para él y su pareja actual, la cual tenía además con dos hijas de 12 y 14 años.
Según las mismas fuentes, el fugitivo residía originalmente en León, aunque con frecuencia iba a Astorga. De hecho, estos desplazamientos pudieron confirmase a través de fotografías publicadas en redes sociales.
En el momento de la detención, el sujeto se encontraba paseando con su pareja, la cual aseguró desconocer que se trataba de un delincuente sexual. Además, los investigadores también confirman que el depredador sexual arrestado por la policía no utilizaba identidad falsa y se dedicaba a trabajos de albañilería.
Los hechos se remontan al año 2017, en el estado de Utah (EEUU), cuando el hombre cometió un delito de agresión sexual agravada a la hija de su pareja. Desde que ocurrieran aquellos trágicos sucesos, este individuo se encontraba en paradero desconocido. Seis años después, en diciembre del año pasado se tuvo el conocimiento de que su intención era viajar hasta España, donde entró en acción la Policía Nacional.
Este hombre llevaba en búsqueda desde el 2017 por varias agresiones sexuales agravadas sobre la hija de su pareja. Dichos abusos no fueron los únicos abusos que sufrió la niña de apenas 11 años. La víctima declaró que, a mayores, el hombre también la obligaba a a ver contenido pornográfico en su teléfono móvil.
Las pruebas de ADN realizadas a la pequeña de tan solo 11 años confirmaron su versión y la incriminación de la pareja de su madre. Ante tales hechos, la policía americana intentó localizarlo, pero ya había huido y dejó su vehículo abandonado en Salt Lake City, capital del estado de Utah, para de esta forma tratar de evitar la cadena perpetua que podrían traer aparejados este tipo de delitos en esa parte del país norteamericano.