Un pueblo segoviano, nueva parada de la Ruta del Vino de Rueda

La Ruta del Vino de Rueda ha incorporado un nuevo miembro a su entidad, el municipio segoviano de Nieva. Se trata de un destino en el que, además de ser el único en la provincia en pertenecer a este grupo de denominación de origen, según apunta el concejal del Ayuntamiento, Carlos Muñoz, el visitante podrá disfrutar además del vino, del patrimonio cultural y natural que ofrece la localidad y los pueblos de su alrededor.

Con este objetivo de “dar visibilidad al destino como territorio vitivinícola” y aportar en su desarrollo cultural y tradicional, nace en 2013 la Ruta, como una entidad público privada que también persigue “crear destino enoturístico en el territorio adscrito a la denominación de origen Rueda”, con todo lo que eso implica, tal y como explica la gerente de la Ruta del Vino de Rueda, Cristina Solís. “Nosotros como Ruta del vino somos un club de productos reconocido por el Ministerio de Turismo, siendo uno de los pocos de España”, aunque como ruta, comparte esta labor con otras 35 más “vinculadas a una denominación de origen”, informa Ical.

En este sentido, Solís destaca que en una ruta del vino intervienen todos los actores que conforman una experiencia turística “no solamente las bodegas, que son el eje vertebrador”, sino también un restaurante, un museo, una agencia de viajes y un medio de transporte “todo aquello que necesita un visitante para vivir una experiencia enoturística”, sin olvidar el concepto de calidad. “Para ser miembro de la ruta del vino, sobre todo las entidades privadas, tienen que pasar una certificación”, explica, “que asegura que todos los servicios que se dan en una ruta del vino son de calidad para el visitante”. Así, “cuando ves el logo de la ruta del vino en un establecimiento está asegurando que está vinculado al mundo del vino y que te van a informar sobre ellos”, en definitiva, “todo lo que espera un enoturista o un amante del vino”.

Desde hace más de una década, la gerente asegura que desde la entidad han trabajado “mucho” la estrategia del territorio, basada en el estudio, análisis y conocimiento de las necesidades dentro y fuera de dicho territorio, además de los propios municipios, empresas y del propio visitante. Así, asegura que tienen “muy claras las líneas que nos definen con mercados competencia de nuestro territorio”. Por un lado, está la historia del vino, “somos una de las primeras denominaciones de origen de España, la primera de Castilla y León”, con una de las primeras rutas del vino y una historia vinícola que se remonta diez siglos atrás, “no solo importante por el tiempo que llevamos elaborando vino, sino por todo lo que nos ha dejado en el territorio en cuanto a tradiciones y uso”. Así, considera que es un “ADN compartido en torno a la uva verdejo”, reconocida a nivel nacional e internacional y “autóctona de la zona”.

“Es lo que vertebra todo el territorio”, asegura, desde la zona sur de Valladolid, pasando por Ávila hasta llegar a Segovia, “como la puerta de entrada al sur de España”. También, destaca el patrimonio histórico y cultural “desde los edificios históricos de cada pequeño pueblo”, que recogen en total 45 monumentos declarados Bien de Interés Cultural en la ruta, “una pata fundamental en cuanto a producto turístico”, así como los productores artesanos “porque el trigo, la oveja y el queso es un refuerzo interesante a la hora de desarrollar actividad turística”.

Para llevar a cabo esta labor, la entidad actualmente cuenta con 150 socios aproximadamente, de los cuales, 22 son municipios, y ocho asociaciones sin ánimo de lucro, siendo el resto empresas “que trabajan por el desarrollo del territorio”. En total la ruta se compone de 22 bodegas y viñedos visitables, complementada con la presencia de queserías, almazaras, restaurantes, talleres de repostería y mucho más, “todo lo que tiene que ver con experiencia gastronómica”. Señala, entonces, que la diversidad de socios “define muy bien el territorio” ya que hay “reflejo claro de la apuesta de las empresas”.

Actividades del vino

“El vino tiene muchas posibilidades”, subraya Solís. Por eso, desde la entidad para esta primavera tienen preparadas diferentes actividades, siendo una de ellas ‘Naturaleza con sabor’ que, según indica la gerente, acoge tres fechas “que probablemente se repitan” en las que unen un entorno natural importante de la ruta con una experiencia gastronómica. Así, destaca la visita al alcornocal, ubicado entre Rueda y Nava del Rey “es uno de los más importantes y antiguos de Europa”, que estará seguida de una cata de quesos en ‘Los quesos de Juan’. También visitará la Reserva Natural de Castronuño para terminar con una cata de repostería en ‘Xocoreto’ y, en Tierra de Pinares, se podrán visitar los pinos en Matapozuelos, para terminar con un menú maridaje en la estrella michelín ‘La botica de Mazapozuelos’, “que permitirá unir esta diversidad”.

Asimismo, los segundos sábados de cada mes tendrán lugar el programa ‘Las conversaciones con el pastor’, jornadas de pastoreo en la que se permite al visitante conocer la vida del pastor, hacer un recorrido con las ovejas y conocer la importancia del cuidado de los animales para conseguir la calidad de la leche y conseguir transformarla en queso. Además, con esa fusión de queso y vino se termina la actividad que incluye la visita a una quesería y una cata de ambos productos “siendo la parte importante el conocimiento del trabajo del pastoreo en el medio rural”.

Sin embargo, Cristina Solís asegura que uno de los momentos estrella de actividad es en el mes de junio, “porque en septiembre y octubre dejamos trabajar a las empresas y municipios”. Así, durante este primer mes de verano, por tercer año consecutivo, se llevarán a cabo las ‘Catas singulares en lugares únicos’, una actividad premiada como la mejor iniciativa turística de la provincia de Valladolid, en la que se elaboran catas organizadas con bodegueros y productores “en lugares donde nunca se puede hacer una cata” al atardecer, acompañada de música en directo. Una experiencia que, según indica Solís, “envuelve al visitante”, así como la que se celebrará en el mes de julio, ‘Atardecer al son del vino’, que acoge catas con concierto en los diferentes viñedos de la Ruta.

Así, explica que cuentan con una afluencia de público mantenida desde primavera hasta otoño, “pero el momento álgido es entorno a la vendimia”, por lo que el mes de septiembre “es un mes muy importante que le intentamos sacar partido en cuanto a oferta y actividad turística”. Octubre también, “por todo ese movimiento que hay a nivel nacional del vino” pero, sobre todo, destaca la época de primavera como “una de las épocas con mayor afluencia de visitantes en la ruta del vino”, ya que en estos meses “el viñedo está precioso y la bodega ya sale al campo con mucha actividad”.

Como visitantes a todas estas actividades, la entidad dispone de un informe que expone un perfil “muy claro”, aunque asegura, “tenemos bastante diversidad de público”. Así, el público principal al que van dirigidas estas experiencias pueden ser parejas, grupos de familia y amigos “pequeños” de entre cuatro y seis personas, siendo el perfil más demandado el de personas entre los 30 y 55 años, en general, “gente disfrutona del mundo del vino procedentes de Madrid, Castilla y León y la franja norte de España”, además de gente que consume el vino Rueda “que quieren venir luego a ver como se elabora y a conocer las bodegas”.

La Ruta en Segovia

Nieva se corona como el único municipio segoviano que forma parte de la Ruta del Vino de Rueda que, recién incorporado “abre la posibilidad de tener actividad vinícola con bodegas y de hablar de la historia del vino de una forma muy especial”, tal y como explica la gerente, Cristina Solís. En la localidad, en términos vinícolas, se encuentran viñedos centenarios “hay muy pocos de estas características en la denominación de origen Rueda” que, en este municipio se conservan, por la respuesta de los suelos arenosos “que sobrevivieron a la entrada de la filoxera”, por lo que se pueden encontrar viñedos añejos “que nos permiten hablar de la historia del vino siglos atrás, de la parte más tradicional”. Asimismo, subraya la existencia de cuatro bodegas reconocidas, “que sirven como puerta de entrada desde el sur”, por lo que, según expone Solís, la Ruta “podría comenzar en Nieva con dirección a la zona sur de España”. Entre los destinos, destaca Madrid porque desde la entidad consideran que es un foco de turistas “muy importante”.

Desde la entidad, consideran que este municipio se puede ver dentro de un “trabajo en red”, que les permite un intercambio de conocimiento, poder trabajar y crear oferta turística entre empresas dentro de la ruta y entre los propios municipios, “buscando sinergias” para conocer lo que funciona y lo que no “algo que es enriquecedor para ambas partes”. Por ello, destaca que el trabajo desde la entidad es ir unido al resto, “dar visibilidad a toda la riqueza vinícola que tiene Nieva y trabajar por una imagen común hacia el visitante”.

Por su parte, desde el Ayuntamiento de Nieva aseguran que su entrada en la Ruta del Vino de Rueda es “una buena forma de promocionar todo lo que el municipio tiene que ofrecer”, creando actividad económica y, además, “ayudando a fijar población”, avanzando que su idea es “colaborar muy activamente para poder promocionar el municipio y frenar la pérdida económica y el invierno demográfico”. En este sentido, el concejal Carlos Muñoz destaca que hay mucho patrimonio cultural por la zona, encontrando en Nieva “un buen ejemplo de arquitectura románico-mudéjar con la iglesia de San Esteban o la ermita de Nuestra Señora del Pozo Viejo”, además de un pino piñonero centenario, con más de 350 años de edad “con un tronco de diámetro superior a los seis metros, protegido por sus características y longevidad”.

Asimismo, avanza que desde el equipo de Gobierno “estamos incentivando la realización de actividades culturales”, poniendo en marcha obras de teatro en el espacio de cine-teatro con el que cuenta el municipio que acoge alrededor de 250 localidades “al que esperamos sacar el máximo partido”. También destaca el Camino de Santiago, que discurre por el municipio en su vertiente desde Madrid, como un atractivo turístico a utilizar para dar a conocer Nieva, así como el comienzo del denominado ‘Mar de Pinares’, que se extiende durante muchas hectáreas y la Ruta verde del valle del Eresma “que recorre el antiguo ferrocarril entre Segovia y Medina del Campo”. Por su parte, en las cercanías del municipio, se encuentra la localidad de Coca “con su castillo y sus monumentos”, el claustro de la iglesia de Santa María la Real de Nieva, el cerro de San Isidro “con vistas impresionantes de la Sierra de Guadarrama y los petroglifos” y lagunas donde se pueden avistar todo tipo de aves.