Diario de Castilla y León

La CHD fija ya restricciones de riego en el Pisuerga y el Bernesga por la sequía

Los regantes del Canal del Pisuerga reclaman un trasvase de agua y «medidas en el corto plazo» / Los embalses se sitúan al 74,5% de su capacidad, cinco puntos menos que en el año anterior 

Una imagen de archivo sobre la sequía en Castilla y León. ICAL

Una imagen de archivo sobre la sequía en Castilla y León. ICAL

Publicado por
Raúl Ruano
Valladolid

Creado:

Actualizado:

Las altas temperaturas y la falta de agua están siendo un constante en último año y medio en España y también en Castilla y León. El comienzo de año tampoco ha escapado a una sequía generalizada y que pone a los regantes en jaque, ya que es el segundo año consecutivo que se da esta situación. La Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) ya ha impuesto las primeras restriccciones a los regantes de los sistemas de explotación Pisuerga y Bajo Duero y Torío-Bernesga

El primero de estos sistemas cuenta con una «dotación máxima por hectárea» de 3.500 metros cúbicos por hectárea. La cifra, según afirma la propia CHD, es la misma tanto para los regadíos que se abastecen a través de canales del Estado como para el resto de tomas de riego. Por su parte, las detracciones de agua  del Torío-Bernesga «deberán ajustarse a los turnos establecidos en el calendario de riego que periódicamente suministrará la Guardería Fluvial» de la Confederación Hidrográfica.

Pese a esta condición, el organismo indica que «en todo caso no se podrá derivar agua del cauce del Torío para riego cuando el caudal circulante por la estación de aforo de Pardavé se mantenga por debajo de los 0,54 metros cúbicos por segundo o los 540 litros por segundo». De la misma forma se da una situación similar en el río Bernesga. No se podrá derivar agua para riego del mencionado río cuando «el caudal circulante en la estación de aforo de León sea inferior a 1,150 metros cúbicos por segundo o 1.150 litros por segundo», según indica el acuerdo  del 11 de abril de la Junta de Gobierno de la CHD en relación con el uso del agua durante la campaña de riego de 2023. 

Agua embalsada en Castilla y León a 26 de abril de 2023. E.M.

Agua embalsada en Castilla y León a 26 de abril de 2023. E.M.

La situación de estos dos sistemas es delicada. La Confederación Hidrográfica del Duero ha declarado la salida de «la situación excepcional por sequía en todas las Unidades Territoriales de Escasez (UTE) en las que estaba declarada», pero con dos excepciones: las UTE Torío-Bernesga y Pisuerga y Bajo Duero. Estos sí mantienen esta condición porque «no hay certeza de que las demandas» de estos sistemas «puedan ser atendidas adecuadamente» . La Confederación reconoce la «situación comprometida» por la que atraviesa el sistema Pisuerga-Duero ya que sus embalses (Aguilar de Campoo, La Requejada y Cervera-Ruesga) cuentan entre los tres con  una reserva del 45,9%.

El organismo que gestiona las aguas del Duero señala que las medidas de dotación máxima y las restricciones «serán objeto de notificación expresa a los usuarios de regadío», además de dar «la suficiente publicidad» para su conocimiento, su publicación en el Boletín Oficial del Estado y en la página web de la CHD; entre otras cuestiones. 

Unas restricciones por la sequía que no han gustado a los regantes del Sistema Pisuerga. Reclaman un trasvase de agua para hacer frente a la sequía. Su presidente, Luis Alberto Nebreda , señala que las restricciones actuales les da  «la mitad» de agua que en años anteriores . A mayores de la complicada situación, se une que es el segundo año consecutivo con sequía y es el tercer año que la padecen en los últimos seis.

Pese a la mala situación que viven los regantes por la continua falta de lluvias, la previsión que maneja la Confederación no es halagüeña en el corto plazo: «El periodo final de aplicación se determinará por el Organismo de cuenca (la propia CHD) a la vista de la disponibilidad de los recursos hídricos a final de la campaña de riego 2023, pudiendo extenderse hasta la campaña de riego de 2024». Si bien, a continuación la Confederación afirma: «Si la situación de disponibilidad de los recursos hídricos no permitiera llevar la campaña hasta el final de año hidrológico, se acortarán las fechas de finalización en todos o en algunos cauces para adaptarse a la disponibilidad del recurso, tratando de conseguir una distribución del recurso ecuánime». 

Una solución que no satisface a los regantes del Sistema de Pisuerga que afirman necesitar «medidas en el corto plazo» y que la CHD «saca balones fuera» con la sequía.  Por ello, los regantes del Canal del Pisuerga reclaman a la Confederación Hidrográfica del Duero reclaman un trasvase de agua. Exigen «medidas excepcionales ante una situación excepcional» derivada por la falta de lluvia: «El agua es un bien público, es de todos, y por lo tanto sería de justicia una aportación de 20 o 30 hectómetros cúbicos», apunta el presidente de la Comunidad de Regantes del Canal del Pisuerga. 

Nebreda resalta que de los últimos seis años, tres han sido de sequía: «En 2017, 2022 y 2023 hemos tenido sequía y hemos tenido la mitad de agua que nos corresponde» . Una situación «insostenible», resume. Por ello exige actuaciones «a corto plazo» de la CHD, pero afirma que la respuesta de la Confederación ha sido que «lo estudiarán en un futuro». Una contestación que les parece insuficiente a los regantes del Canal del Pisuerga porque necesitan «una solución inmediata». 

El presidente de la Comunidad explica que la zona que está en peor situación es la del Bajo-Duero y la parte del Pisuerga no puede ayudar porque se quedaría sin agua. Ante esta situación, Luis Alberto matiza que no se trata de un trasvase entre diferentes cuencas, si no que sería dentro de la propia cuenca del Duero, lo que facilitaría la operación. La mala situación de los regantes del Canal del Pisuerga por la sequía se le suma la inflación económica: «Nos está ahogando» , lamenta. Por ello pide «una decisión política» que permita llevar agua al bajo Duero desde el «alto Duero, el Arlanza, el Carrión o el Esla». Debido a la configuración de la propia CHD, «existe suficiente conexión para poder aportar agua a todo el sistema Pisuerga-Bajo Duero», afirman Luis Alberto Nebreda. 

La Comunidad de Regantes del Canal del Pisuerga también reclama a la CHD una garantía de aportación de recursos en función del consumo de cada agricultor, «puesto que nos parece de justicia que quien ha sacrificado un cultivo determinado, con un criterio de ahorro, no reciba después el mensaje de que no hay agua para él» .

A través de un comunicado remitido a los medios de comunicación, los regantes del Sistema Pisuerga exigen garantías de que «no habrá desembalses masivos desde los pantanos del sistema de Pisuerga para atender carencias fruto de extracciones masivas e inadecuadas realizadas aguas abajo». Apuntan que «ese proceder por parte de la Confederación, que ha sido habitual otros años, deja a las comunidades de regantes de cabecera (como es la del Pisuerga) a los pies de los caballos porque dispone exclusivamente de agua del pantano». 

Situación de los embalses

La falta de lluvia afecta al estado de los embalses y por ende a los regantes. Su situaciónen Castilla y León es negativa si se compara con el año anterior y peor en términos generales si se hace con la media de los últimos diez años. Concretamente, el Sistema Pisuerga es el que peor capacidad, en términos porcentuales, tiene de toda la CHD. El embalse de Cervera-Ruesga cuenta con el 85% de su capacidad. Por su parte, el de Aguilar de Campoo está al 46% de capacidad (el máximo son 247 hectómetros cúbicos) y el de La Requejada cuenta con un 46,8% de volumen embalsado de 58 hectómetros cúbicos de capacidad. Entre los tres suman 144 hm3 de agua pese a tener una capacidad de 315, lo cual supone un 45,9%

Situación de los embalses en Castilla y León. E.M.

Situación de los embalses en Castilla y León. E.M.

Los datos del 26 de abril a las 8.00 horas que ofrece la CHD son similares, aunque algo peores, si se compara con los de hace un año, que se situaban en el 50%. La comparación con la media de hace 10 años es peor ya que se sitúa en el 77%, 32 puntos porcentuales menos. El porcentaje de agua en los embalses del Sistema Pisuerga es el más sangrante, aunque la situación es generalizada en el resto de la cuenca del Duero. En términos totales, los embalses están en el 74,5% de su máxima capacidad cuando en el 2022 por estas mismas fechas estaban en el 79,4%. Mientras que la media de los últimos diez años se encuentra en el 85,5%, 11 puntos más que la del presente curso. 

La mala situación es común en el resto de los embalses y sistemas. El Sistema del Esla y Órbigo acumula un 79,4% de volumen embalsado, mientras que el año anterior se situaba en el 88,8% y la media de la última década se encuentra en el 89%, muy similar a la de 2022. El Sistema Carrión está actualmente al 82% de su capacidad total, mientras que hace un año estaba en el 71%, es de los pocos en los que aumenta su porcentaje. Cabe destacar que su volumen total es de 163 hectómetros cúbicos, el quinto mayor. 

El S istema de Arlanza tiene el 76% de capacidad y el año anterior el 73%, ligeramente superior. Por su parte el Sistema Alto Duero se encuentra con el 74% de ocupación, mientras que en 2022 tenía el 67%. El Sistema Riaza-Duratón y Cega-Eresma-Adaja se sitúa en el 89% actual y el año pasado estaba en el 78%.  El sistema Tormes tiene el 77% en 2023, mientras que en el año anterior se encontraba en el 85%. Por último, el sistema Águeda está en el 60%, pese a que en el curso pasado estaba en el 67%. 

tracking