El PSOE sale “a por todas” en las municipales con candidatos “reconocidos” frente a los “a dedo y a rastras” del PP
Ana Sánchez afirma que los alcaldes socialistas son "el dique de contención" a las políticas de "la extrema derecha y la decadencia del PP"
El PSOE de Castilla y León sale en estas “determinantes elecciones” municipales “a por todas” con candidatos “reconocidos” , que conocen sus ciudades, y que han sido elegidos de manera democrática frente a “la tómbola del PP”, su “dedazo” y “a rastras” , lo que les llevará a perder estos comicios del próximo mes de mayo.
Así lo expresaron la secretaria autonómica de Organización, Ana Sánchez , y el secretario federal de Estrategia y Acción Electoral, Javier Izquierdo , en una rueda de prensa tras la reunión con los responsables de Organización para programar el trabajo de los próximos meses, en los que prevén una “multiplicación” de dirigentes en el territorio, informa Ical.
Los socialistas arrancan la precampaña el sábado, 21 de enero en Valladolid, con la presencia de Pedro Sánchez para apoyar a los candidatos y candidatas a las capitales de las nueve provincias, en un acto en la Cúpula del Milenio y con Óscar Puente como anfitrión.
Precisamente, Ana Sánchez invitó a Alberto Núñez Feijóo a venir a la Comunidad a presentar a los candidatos del Partido Popular , ratificados por los órganos de su partidos en estos tres últimos días, más allá de la visita a Salamanca, el día 20, donde está citado en el juzgado para explicar por qué no se ha convocado el congreso en esa provincia, informa Ical.
“Si uno no quiere ser alcalde de su ciudad, no puede ser buen alcalde y perderá” , advirtió Ana Sánchez, al valorar la designación de Jesús Julio Carnero a la Alcaldía de Valladolid, pero que extendió a otros, como a Cristina Ayala en Burgos, ciudad en la que no vive. “Frente a los del dedazo de Mañueco, los candidatos de la gente” , calificó.
En tal sentido, puso en valor un partido fuerte y unido, con candidatos reconocidos, que conocen sus ciudades y cuya gestión enmarcó como “un dique de contención a la extrema derecha y a la decadencia del Partido Popular” , ante el pacto de ambos en la Junta de Castilla y León.