Clamor sanitario: «No es negociación, es imposición»
Casi 3.000 profesionales protestan contra el decreto y la Junta reconoce problemas de comunicación
Tal y como anunciaron la semana pasada, los profesionales sanitarios de Castilla y León se manifestaron esta mañana a las 11.00 horas frente a los hospitales y centros de salud de la región para protestar contra el decreto que impuso la Junta este sábado, sin aviso previo, y que regula las prestaciones laborales del personal de Sacyl. En total acudieron a las concentraciones cerca de 3.000 trabajadores de todas las provincias de la Comunidad y portaron pancartas con mensajes como ‘No somos recortables, somos indispensables’ o ‘Con este Mañueco, derechos de muñeco’, acompañados de gritos al unísono como ‘No es negociación, es imposición’ o ‘Sanitarios agotados’.
En la misma mañana, a pocas horas de la finalización de las protestas, el vicepresidente Francisco Igea y la consejera de Sanidad Verónica Casado admitieron tras el Consejo de Gobierno un «problema de comunicación» con los sindicatos en lo relativo al decreto. «Es simplemente el paraguas legislativo. No vamos a hacer nada por imposición, ni sin haber pasado por el consenso, ni que no sea incentivado», declaró Casado. Por su parte, Igea aseguró que tienen intención de compensar a los trabajadores del sector con primas retributivas.
Ambos dirigentes instaron a volver a la negociación porque «la mesa de la Sanidad es prioritaria» y agradecieron el trabajo de los profesionales a la vez que lamentaron que algunos de ellos crean que hacen algo en su contra. «Todo lo que hagamos lo tenemos que hacer de forma negociada, pero tenemos que ajustar el sistema para dar atención a la COVID y a la no COVID, y para eso se tiene que reorganizar y se tienen que hacer cambios, todos valorados en la mesa sectorial. Estamos dispuestos a hablar de absolutamente todo» , sentenció la consejera.
Respecto a las manifestaciones, en todas se leyeron los manifiestos escritos de manera conjunta por los seis sindicatos sanitarios que conforman la mesa: SATSE, CSIF, CESM, UGT, CCOO y USAE. En él, muestran su «más absoluto rechazo» al decreto 2/2020 y tildan de imposición la forma en que la Junta les quita de manera «abusiva y total» sus derechos laborales y personales. Asimismo, piden al gobierno autonómico «responsabilidad, respeto y seriedad» con los sanitarios y la ciudadanía. «Es una barbaridad imponer una agresiva movilidad geográfica forzosa; suprimir permisos, cambiar o doblar jornadas de trabajo y obstaculizar la conciliación familiar y laboral, disponiendo de nuestro trabajo al antojo de la gerencia de salud», expusieron en el escrito.
En Valladolid, más de 300 personas se manifestaron frente a la Consejería de Sanidad, donde los representantes sindicales regionales acusaron a la Junta de tratar de enfrentar a los sanitarios con el resto de la población y añadieron que no lo van a permitir. Entre León y El Bierzo, superaron el medio millar de profesionales para protestar contra un decreto que «se carga los derechos de los empleados de la Sanidad de Castilla y León» . También Salamanca contó con más de medio millar de manifestantes que advirtieron estar «agotados, exhaustos y rotos físicamente» . En Zamora fueron cerca de 200 los sanitarios indicaron que pasaron de aplausos en la primera ola a verse asfixiados en esta segunda. Frente al Hospital Río Carrión, en Palencia, se concentraron unas 250 personas, lo mismo que se presenció en el Hospital General de Segovia. Por último, en la capital abulense unos 300 sanitarios se manifestaron en el Hospital Nuestra Señora de Sonsoles.