Sanidad extiende ahora el test antigénico a todos los contactos y para cribar residencias
Refuerza las medidas en los geriátricos, donde recupera los catorce días de aislamiento para positivos
A la vista de la eficacia de los test de antígenos –a los que se atribuye en parte el éxito de las últimas semanas en la Comunidad de Madrid para controlar la transmisión del virus– también Castilla y León dará mayor prioridad a esta herramienta para identificar nuevos casos con agilidad. En especial, para detectar posibles contagios en el entorno próximo de cada positivo. Y también para realizar cribados dentro de los geriátricos y residencias de estudiantes, donde estas pruebas se utilizarán cada vez que se detecte un brote para evaluar «a todos» los usuarios y trabajadores del centro, aunque no hayan tenido un contacto estrecho reportado el contagiado.
Éstas son algunas de las novedades establecidas en la actualización del ‘Procedimiento de diagnóstico, vigilancia y control de casos’, cuya última revisión fue enviada ayer a los profesionales de Atención Primaria desde la dirección general de Planificación y Asistencia Sanitaria y la de Salud Pública.
El protocolo detalla que «se amplía la indicación del uso del test antigénico», que a partir de ahora se realizará a todos los contactos estrechos de un contagiado «tanto al inicio como para finalizar la cuarentena». El objetivo es agilizar al máximo la detección precoz de nuevos positivos y evitar que los contactos evaluados tengan que esperar uno o dos días los resultados de su prueba. Esa rapidez debería facilitar que las personas del entorno de un caso cumplan con las medidas de cuarentena domiciliaria que conlleva la condición de contacto estrecho y que muchos pacientes no respetan hasta la obtención del resultado de la prueba.
Con la anterior versión del documento, los profesionales venían alternando PCR o test antigénicos en la prueba inicial que se realiza a cada contacto estrecho, pero a partir de ahora será el de antígenos el que se practique por sistema. Para la prueba final –la que se realiza diez días después del último contacto con el positivo– se seguirá utilizando este test rápido, como hasta ahora.
Esta decisión supone impulsar el uso de los antigénicos en Castilla y León en detrimento de las PCR , equivalentes en fiabilidad en la mayoría de los casos pero más lentas en la emisión de resultados.
Tanto para la PCR como para el test antigénico, la muestra se toma mediante exudado nasofaringeo del paciente. El palito en la nariz, para entendernos. La principal diferencia entre una y otra herramienta es la rapidez: entre 24 y 48 horas tarda el resultado de la ‘reacción en cadena de la polimersa’, frente a los 30 minutos máximo de este test rápido, cuya sensibilidad nada tiene que ver con los también llamados ‘test rápidos’ utilizados al inicio de la pandemia a partir una gota de sangre.
La Consejería de Sanidad introdujo los test de antígenos en Castilla y León a finales de septiembre para agilizar la detección de casos. Desde entonces ha utilizado 46.190 en Castilla y León, según los últimos datos publicados ayer por Sacyl.
El uso de estos dispositivos, que también son mucho más económicos que las PCR, ha despegado con mayor fuerza en otros territorios del país, como Madrid, Ceuta y Melilla, precisamente que lideraban el ránking nacional de incidencia. Destaca el caso de la comunidad madrileña: sólo en la última semana realizó 131.681 test antigénicos frente a 56.504 PCR. Es decir, el t70% de las 188.185 pruebas practicadas fueron estos test rápidos, según los últimos datos publicados por el Ministerio de Sanidad, relativos al período entre el 7 y el 13 de noviembre. Mucho menor es la proporción en Castilla y León, que la última semana utilizó 17.145 pruebas rápidas frente a 59.410 PCR. Es decir, aquí sólo el 22% fueron antigénicos.
Además de generalizar su uso para los contactos estrechos, el nuevo procedimiento autonómico también indica el test de antígenos para confirmar o descartar la infección por coronavirus en personas que presentan síntomas, pero no en todas, sólo en aquellas que los presenten en los últimos cinco días.
La apuesta de Castilla y León por los antigénicos no significa que vayan a dejar de utilizarse las PCR, que siguen siendo la prueba más recomendada para los casos sospechosos con más de cinco días de evolución de los síntomas. También se mantendrá para determinar el contagio en personas con alta sospecha clínica que hayan dado negativo a una primera prueba, en los casos confirmados de personal sanitario y sociosanitario previo a la reincorporación a la actividad laboral y para descartar la infección antes de una operación quirúrgica en el hospital, entre otros.
Las PCR también seguirán siendo una técnica preferente en las residencias y centros sociosanitarios , tanto para evaluar a personas sintomáticas como para buscar contagiados entre los contactos estrechos.
Otra de las novedades que introduce Sanidad es que a partir de ahora realizará un cribado masivo –también con test antigénicos– cada vez que se detecte un brote en centros sociosanitarios y residencias, ya sean de mayores o de universitarios. Eso supondrá testar a todas las personas del centro, tanto trabajadores como residentes, «y no sólo a los considerados contactos estrechos», puntualiza el documento. En los geriátricos se considera brote a la detección de un sólo caso y en las residencias estudiantiles son necesarios tres los positivos con vínculo epidemiológico para hablar de brote. El objetivo, es «la detección precoz de todos los casos compatibles con covid-19 como punto clave de control de la transmisión», argumenta el protocolo.
Ese cribado no conllevará una cuarentena generalizada para el personal y los compañeros de residencia , medidas que sólo deberán seguir los contactos reportados por el positivo. «Las personas que no cumplan criterios de contacto estrecho, no tendrán que realizar cuarentena si el resultado fuera negativo, aunque sí vigilancia activa de síntomas», puntualiza el texto.
En el caso de las residencias, el refuerzo de las medidas contempla más pruebas para las personas que han mantenido contacto con un positivo: si el resultado del test de antígenos es negativo, a los contactos estrechos se les realizará a continuación una PCR, en ese momento. Y otra al décimo día del último contacto.
Además, Sanidad recupera para algunos contagiados los catorce días de duración del aislamiento, en lugar de los diez días generalizados en el último protocolo. Dos semanas deberán permanecer aislados los positivos que vivan en residencias de mayores y centros sociosanitarios así como aquellos que han requerido ingreso hospitalario y que recibieron el alta hospitalaria con una PCR positiva.