Diario de Castilla y León

Nueva purga en la consejería de Cs

Después de los ceses en cascada en el área de Empleo e Industria con la llegada de Ana Carlota Amigo, ahora liquida a los gerentes del servicio de empleo de Ávila, Burgos, Valladolid y Salamanca y a la jefa de Trabajo de León

David Martín, en una imagen de archivo. ICAL

David Martín, en una imagen de archivo. ICAL

Publicado por
Felipe Ramos
Valladolid

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Dimisión o cese.  Esa es la disyuntiva en la que los nuevos dirigentes de la Consejería de Empleo e Industria, que dirigen Ana Carlota Amigo y su viceconsejero de Empleo, el abulense David Martín, está colocando a los gerentes de empleo, jefes de las oficinas territoriales de trabajo y otros mandos intermedios. Toda una estrategia para llevar a cabo una nueva purga en el área de Empleo e Industria, la segunda ya desde que Ana Carlota Amigo asumiera el cargo de consejera, en plena crisis de la pandemia del coronavirus tras la dimisión de Germán Barrios, por sus discrepancias «insalvables» con el vicepresidente de la Junta, Francisco Igea.

Una purga que, como casi siempre suele suceder en estos casos, no tiene que ver con criterios profesionales, porque a quienes ahora se les cesa u obliga a presentar su dimisión tienen reconocido ese prestigio profesional y el trabajo desempeñado hasta ahora así lo demuestra, ni con la mejora del servicio, entre otras cosas porque a quienes se está echando de los servicios de empleo y de trabajo de las provincias son los mismos que los han estado gestionado durante la peor crisis padecida por esta tierra que se recuerda. Los mismos que autorizaban miles de Ertes en tiempo récord o que solventaban y agilizaban innumerables ayudas que se habilitan para combatir la pandemia del coronavirus. Los mismos, por otra parte, de los que se alababa su trabajo no hace tanto desde la propia  Consejería y desde la Junta. Esos son a los que ahora desde la consejería se le echa.

Poco importa porque esta nueva purga, la segunda en el computo general de este área desde que aterrizara Ana Carlota Amigo, no busca más que colocar a amigos y afines a la causa de Francisco Igea, es decir aquellos que le dan su respaldo y que le apoyan en todas y cada una de sus guerras de partido, la última la de las primarias contra Inés Arrimadas. Situarlos como agradecimiento por ese apoyo ‘desinteresado’ al vicepresidente de la Junta, portavoz y consejero de Transparencia, Ordenación del Territorio y Acción Exterior y para que no se queden fuera de juego, después del varapalo sufrido. Lo que viene a llamarse un premio a los servicios prestados a la ‘causa Igea’.

La primera tanda de esta purga llegaba a finales de mayo, nada más aterrizar Amigo tras descartar la dirección de Madrid a David Martín como consejero, tal y como proponía Igea, con la entrada en la Dirección General de Trabajo y Prevención de Riesgos Laborales , donde llegaba José Antonio Bartolomé, ex diputado por Zamora en el Congreso y ex responsable de Acción Sindical de CCOO Zamora, a quien Igea llevaba tiempo intentando colocar al frente del Serla sin poder conseguirlo por el rechazo frontar de UGT; en la Dirección General de Economía Social y Autónomos , que pasaba a manos del procurado palentino Juan Pablo Izquierdo, afín y de absoluta confianza del vicepresidente de la Junta; y, por último, se nombraba a una nueva Secretaria General en la persona de Ruth Valderrama .

Ahora, un mes después y tras avisos y visitas, como la de José Antonio Bartolomé a la jefa territorial de Trabajo de León, para que s marcharan antes de que prescindiran de ellos llegan los ceses de los gerentes provinciales del servicio público de empleo de Ávila, Javier Luis Jiménez; Burgos, Fernando Millán; Salamanca, Pedro Grijalba; y Valladolid, Edmundo Cañón; y de la jefa de la oficina territorial de trabajo de León, Ana Guerrero.

En el caso de los de Burgos y Valladolid este cese llegaba «a petición propia», según se detalla en la orden publicada este jueves en el Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl), y a ambos se les agradece los servicios prestados. El resto de los ceses llega porque «para sus superiores jerárquicos se ha producido la pérdida de confianza en sus actuaciones» y nada que agradecerle. Esa pérdida de confianza es la justificación porque no pueden aludir a una falta de eficacia, que les podría acarrear un recurso ante el Contencioso-Administrativo, algo que pueden hacer cada uno de ellos en el plazo de dos meses desde este jueves que se publicaba su salida. Además, y como paso previo, también tienen la vía de un recurso de reposición ante la propia Consejería de Empleo en el plazo de un mes, que evidentemente de nada va a servir.

Lo que tienen que hacer ahora, a cada uno de ellos, es garantizarles una plaza de nivel 28, o no menos de dos niveles menos, en la misma localidad en la que se encuentran desempeñando su actividad profesional.

A estos nuevos gestores de Empleo e Industria, según las fuentes consultadas por este periódico, poco o nada les ha importado que, en el caso del ya ex gerente provincial de empleo de Salamanca, Pedro Grijalba, quien se jubilaba en marzo de este año y en una demostración de compromiso y de profesionalidad pedía prorrogarlo un año más ante la pandemia del coronavirus. El premio que recibe ahora es el cese.

Si a esto se le añade que el viceconsejero de Empleo que mueve los hilos de la consejería pretende colocar en el servicio de industria de Ávila a Isabel Romero, veterinaria y licenciada en Derecho por la Uned y lo más importante, amiga de David Martín, con lo que cumple el requisito esencial para ocupar un cargo en la Consejería de Empleo, ser amiga de..., se aprecia bien a las claras las intenciones de los hombres de Igea en la consejería, primar el amiguismo.

Y, a todo esto, la consejera Ana Carlota Amigo, defiende los ceses convencida de que este es el mejor momento, ya que dice que busca «dar un impulso nuevo» a este departamento que dirige Ciudadanos en el reparto de funciones en el acuerdo de Gobierno con el PP.  Tras agradecer el trabajo realizado por los cesados, algo que no se recoge en el Bocyl, salvo en los que aceptan irse «a petición propia, especialmente en unos momentos de crisis como la surgida por la pandemia del coronavirus, Amigo insiste en la conveniencia de dar un impulso nuevo a su Consejería. 

 «Sí, es el mejor momento» , resondía la responsable de Empleo a preguntas de los periodistas en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, en la que apelaba al «trabajo enorme» que va a asumir la Consejería de Empleo e Industria con la tramitación de las ayudas a los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (Erte). «Hay que dar el cien por cien, es el momento adecuado» , remarca  Amigo quien vuelve a asegurar que se ha hecho un «trabajo excelente» hasta ahora. «No sé qué funcionarios se van a interesar por estos puestos»,añade Ana Carlota Amigo, quien anunciaba la convocatoria pública para cubrir estos puestos mediante el sistema de libre designación. Y, mientras tanto, en el periodo con más trabajo, con la gravedad de la crisis del coronavirus azotando a empresas, grandes y pequeñas, trabajadores y autónomos, el trabajo de los servicios provinciales de empleo de estas provincia se frena tras una nueva purga.

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