Tudanca: «Empujaremos junto al Gobierno para salir de esto cuanto antes»

«Lealtad y unidad» . Ese fue el mensaje que envió, una vez más, el secretario regional del Partido Socialista de Castilla y León a la Junta y a los agentes económico y sociales de la Comunidad.

Tudanca abogó por «la unidad para luchar juntos, para hacer propuestas, para debatir y llegar a las mejores soluciones», una fórmula que debe anteponer el interés general, «para hacer fuertes a las instituciones y defender la democracia» . «Aquí nos tiene, aquí nos ha tenido y aquí nos tendrá hasta el final, empujaremos junto al Gobierno cuanto sea necesario para salir de esta», aseveró el socialista.

A pesar de su voto positivo para la convalidación del decreto-ley del Gobierno de Alfonso Fernández Mañueco, el socialista califico las medidas de « positivas » pero escasas». «Algunas de las medidas anunciadas no eran más que las que ya existían a las que pusieron el apellido COVID-19 para que parecieran decisiones nuevas», criticó, pero garantizó su apoyo al «gran pacto de comunidad», que propuso el presidente de la Junta.

Así, desglosó las ayudas económicas, para concluir que «esto deja sólo 50 millones de euros nuevos», ya que, según la propia memoria económica de la autonomía, 65 millones se financian a través de Programa de Desarrollo Rural del periodo 2014-2020, 3,6 suponen la aceleración de la ejecución de contrarios y otros 5,4 una reperiodificación de ingresos.

«Escaso bagaje para hacer frente a las consecuencias de la pandemia», manifestó. Al respecto, Luis Tudanca insistió en pedir «ambición» a la Junta para proteger a los que más lo necesita y para afrontar la recuperación de la forma «más rápida y más justa» y como ejemplo puso su plan de 3.000 millones.

Otras comunidades y ayuntamientos, dijo, han movilizado fondos propios. A su juicio si Valencia, Asturias, Andalucía o Extremadura pueden, se preguntó por qué no es posible en Castilla y León, informa Ical. Así pidió que la Comunidad no se quede «atrás» y afronte con «decisión y rapidez» esta situación. 

Aunque el grupo mayoritario de la Cámara presentó discrepancias, Tudanca afirmó que «es el momento de la empatía, de la sensibilidad y de la prudencia» y que la lealtad de su formación «no tiene precio y no exige contraprestación» porque es «con los ciudadanos de esta tierra».

El secretario regional aludió a «los juicios precipitados, exigencias desaforadas y algunas adjudicaciones de responsabilidad a la ligera», –que se han escuchado en relación a las decisiones del Gobierno y sus contrarias–, «como si las opiniones categóricas y los dogmas pudieran arrojar luz ante tanta incertidumbre» y «como si aquí no se hubieran cometido errores o caído en contradicciones».

Por ello, defendió la gestión del Ejecutivo de Pedro Sánchez y las medidas implementadas, como las facilidades de los ERTEs, para evitar los cierres de empresas y garantizar el salario de los empleados, la prestación para los autónomos, los préstamos y avales para impulsar la liquidez o el blindaje del derecho a la vivienda, entre otros.

Al hilo de esto, Tudanca evidenció que ya es hora de «blindar la sanidad pública» en Castilla y León porque «no se puede salir a aplaudir a los profesionales y luego recortar lo público». También mostró preocupación por la educación, porque «la comunidad educativa merece ser escuchada y respetada»

El socialista agradeció la predisposición al diálogo del Gobierno regional, pero citó algunas de las propuestas de su formación en relación a los centros residenciales, que no recibieron respuesta, como es el plan único de actuación, la ocupación de las plazas públicas de residencias, un incremento de la inspección, dato homogéneos, reforzar recursos humanos y la creación de un biobanco de muestras.

«Nuestro país, nuestra tierra, nos necesita más que nunca. Por eso espero que el acuerdo se habrá paso, unos acuerdos por la reconstrucción en los que también se escuche la voz de Castilla y León, que sirvan para no dejar a nadie atrás. Hagamos todo lo posible para devolver la esperanza a nuestro país», concluyó.

El portavoz del Grupo Mixto se mostró dispuesto a llegar a acuerdo, porque ahora a su juicio es el «momento de la unidad», y de iniciar «un camino» con el que afrontar un plan de reconstrucción en el que las personas sean lo primero. Así, señaló que se debe apostar por Castilla y León por un cambio de paradigma y por un modelo de desarrollo sostenible, ligado al fortalecimiento de servicios y basado en el cambio de modelo de gestión, en el que lo privado deje ser regla general, informa Ical.

«Lo privado trae malas consecuencias», dijo y puso el ejemplo de las residencias. También demandó un nueva fiscalidad, para que haya justicia fiscal.

La portavoz del Grupo Ciudadanos se sumó a la oferta del pacto para salir de esta situación «entre todos» y «todos juntos». Así, se mostró convencida de que Castilla y León va a ser un «ejemplo» en materia de acuerdo y valoró la actuación del Grupo Socialista y su portavoz, Luis Tudanca. Así abogó por «trabajar de la mano y en una sola dirección». «Solo unidos seremos más fuertes», por lo que tendió la mano a las fuerzas del parlamento para abordar unos presupuestos de unidad.

     Amigo insistió en la obligación de los políticos de servir a los ciudadanos. “Debemos estar a su altura”, dijo.

El procurador de UPL afeó al presidente que no llamara en estas semanas a los integrantes del Grupo Mixto y lo invitó a la «leal» colaboración con el Estado, las diputaciones y las entidades locales. «Vamos tarde ya», dijo en relación a otras comunidades, y abogó por la interrelación entre administraciones, para que «nadie se quede en el camino». “Estaremos al lado y arrimando el hombro».

Santos aseguró que no se estaba preparado para ofrecer EPIs a los profesionales sanitarios, ni que el sistema era el mejor del mundo, pese a la formación y capacitación de los sanitarios. “La respuesta no fue la adecuada”, dijo.