La alerta de un sector vital para la Comunidad
EDITORIAL
La pandemia del coronavirus va dejando tras de sí, además del gravedad de la crisis sanitaria, las secuelas de una crisis sin precedentes en la economía de Castilla y León.Y entre los sectores más perjudicados se encuentra el de los servicios, la hostelería y el turismo principalmente, que vienen sufriendo las restricciones desde el primer momento.
Cierre de la hostelería, que frena el consumo y que arrastra a otros sectores esenciales para el Producto Interior Bruto (PIB) de Castilla y León. Y es aquí donde aparece el mundo de las bodegas y del vino , que lanza un SOS, ante la grave situación que está viviendo y el futuro nada halagüeño que se presenta, con la campaña de Navidad prácticamente perdidad. Es verdad, como bien señalan desde las propias DO, que la situación en cada Denominación de Origen es diferente, sin embargo, las pérdidas están ahí. De media, calculan que sus cifras descenderán un 15% con respecto a las del pasado año. Por este motivo, están buscando nuevas fórmulas para captar la atención del consumidor, a la vez que reclaman ayudas.
La alerta la lanzaba la patronal vallisoletana de empresarios , que venía a dejar claro que el sector vitivinícola se enfrenta a un final de año que amenaza su supervivencia, de ahí su reclamación para que la administración tenga «una especial sensibilidad» con aquellos sectores que sean proveedores de actividades que están obligadas o hayan estado obligadas al cierre.
Un sector que depende económicamente de actividades afectadas de forma directa o indirecta por el Covid, por lo que la paralización de la actividad que provoca el confinamiento de la hostelería y las restricciones a la movilidad plantea un escenario muy complicado para las bodegas y todo el sector vinícola.
Una situación que les hace exigir medidas específicas dirigidas a sectores dependientes que, pese a no tener impuestas limitaciones directas a su actividad, ésta no puede realizarse plenamente mientras no se levanten las restricciones a la movilidad y comience a funcionar a pleno rendimiento la hostelería.
Debe potenciarse desde la administración aún más el consumo del producto local . Además de ayudas directivas se necesita incentivar ese consumo para relanzar un sector esencial para la Comunidad.