Irregular apertura de la media veda, como casi siempre...

La temporada de caza de la media veda que arrancó este viernes el Día de la Virgen de Agosto volvió a poner de manifiesto que las codornices son las aves más imprevisibles, viajeras y caprichosas de todas cuantas son objeto de caza en nuestra Comunidad.

Bastantes más sombras que luces en una mañana inaugural que hace tan solo 15 días se presumía como que iba a ser muy buena. El gozo en un pozo pues la realidad es que la jornada resultó en muchos cotos anodina, nefasta y decepcionante, mientras que en algunos puntos la jornada se saldó con algunas codornices en el cinto pero cualquier caso con bastantes menos de las que se preveía.

En Valladolid el director de la Escuela de Caza de Castilla y León Claudio Sánchez manifestaba a este diario que, "la primera mañana se saldó con muy pocas capturas y con una media de dos codornices por cazador, aunque como siempre hay que destacar excepciones y en este sentido una de las cazadoras que tuvo una mañana magnífica fue precisamente la presidenta del coto de Fuensaldaña, Aurora Antolín que abatió diecinueve codornices quedándose a una sola del cupo establecido de veinte ejemplares por cazador y día.

En el coto de Roturas también se considera aceptable la apertura pues un par de escopetas llegaron a los veinte codornices cazando en las zonas del páramo, aunque estos casos han debido ser la excepción porque como tónica general en la provincia vallisoletana hubo más decepciones que alegrías. Cuadrilla de cuatro cazadores en Alaejos abatieron cuatro codornices , después de ver once, y algunos pollos nuevos a los que no dispararon.

Asimismo en Olmedo hubo bastantes “bolos” aunque también cazadores de renombre que lograron llevarse siete codornices en esta primera mañana como Gerardo Capa. En Nava del Rey se dio mal sin paliativos con una o dos codornices de media siendo muy poquitos los que sobrepasaron estas cifras mientras que en Castronuño por ejemplo, el campeón autonómico de caza David Alonso se colgaba 7 africanas, las mismas que lograba en Villalar un afortunado cazador local y cifra similar e igual a la que dos aficionados de Villanubla cobraban, sintiéndose afortunados, porque el resto de cazadores de estos cotos vieron muy poquitas codornices y en algunos casos ni verlas, como quien suscribe, que después de andar toda la mañana en el coto de Simancas donde las cacé el año pasado, en la jornada inaugural no llegué a realizar ni un solo disparo ni a levantar una codorniz en el mismo escenario.

En Simancas alguna cuadrilla colgó media docena de codornices, "cuando todos éramos conocedores de que hasta hace dos semanas había codornices en abundancia, tantas o más que el año pasado que resultó ser excepcional." señalaba el presidente de coto simanquino Raúl Rodríguez.

En cualquier caso los aficionados coincidían en que los fuertes calores soportados estas dos últimas semanas, al igual que el cambio de luna y el viento que se ha levantado estas últimas noches han sido determinantes para que las codornices hayan ido a buscar lugares más frescos, pero ni en estos puntos se las encontró ya que en cotos cercanos a Herrera de Pisuerga, en Palencia, dieron con las codornices en zonas donde otras temporadas llegar al cupo de 20 de ejemplares estaba al alcance de muchos aficionados.

Únicamente el Sandoval de la Reina y en algún coto del Cerrato palentino y burgalés, como en Valdelucio, sus socios tuvieron una mañana entretenida. En Soria ocurrió más de lo mismo, tal y como destacó el delegado soriano José María Manzano que cifraba en una media de cuatro a seis codornices por la zona de El Puerto de Oncala mientras que en Rioseco De Soria la media subía entre 8 y 10 ejemplares.

Entretanto cazadores zamoranos de la Ribera del Duero, como en la zona de Almaráz de Duero la campaña arrancó muy mal siendo muy poquitos los cazadores que lograron llevarse un par de codornices al cinto en una situación idéntica a la vivida en muchos cotos de La Moraña abulense donde apenas vieron codornices.

Asimismo el encargado del Proyecto Coturnix en Castilla y León, José Antonio Pérez Garrido destacaba que en algunas zonas de secano de la ribera del Esla, como en Castrofuerte, se había pasado una mañana aceptable y se habían abatido medias de cinco codornices, aunque hubo alguno que vio más y no la disparó al no ser mostradas por su perro. "No hemos arrancado como el año pasado ni mucho menos pero queda toda la temporada por delante, nos quedan muchos días, y todos sabemos que las codornices les gusta moverse y suelen volver por donde entraron en la primavera así que, no nos queda otra que esperar a que la campaña avance" manifestaba a este periódico este cazador, veterinario y Máster en Fauna Euromediterránea.