Cipriano García: "Debemos reivindicar una PAC justa y adaptada a la realidad de Castilla y León"

El club de prensa de El Mundo de Castilla y León reunió este viernes en Sercotel Valladolid a autoridades, representantes del sector y agentes económicos para debatir las claves de la Política Agraria Común (PAC) más allá de 2027 en una jornada que abrió el director general de Caja Rural de Zamora, Cipriano García, con una apelación: "Necesitamos una PAC justa, estable y adaptada a la realidad del territorio". El directivo subrayó que el futuro de la PAC "es también el futuro de nuestras gentes, de nuestros pueblos y de una parte esencial de la economía y la identidad de esta Comunidad".

En sus palabras de bienvenida, el directivo de Caja Rural compartió un mensaje que vertebró el resto del debate: la PAC ha sido "desde hace décadas, el pilar sobre el que se apoya la viabilidad de buena parte del campo castellano y leonés". Un pilar con métricas concretas: "Más de 60.000 explotaciones y más de cinco millones de hectáreas" acogidas al sistema de ayudas en Castilla y León, "más del 20% del total nacional". Más allá del dato, defendió su impacto en fijación de población, mantenimiento de servicios, empleo y el relevo generacional de jóvenes agricultores.

García ligó ese horizonte europeo a un modelo de banca de proximidad que, dijo, ha caminado junto al sector durante más de un siglo: "Llevamos más de 100 años siendo parte de ese esfuerzo". Reivindicó una forma de hacer "que nació del mundo rural", que hoy "sigue abriendo oficinas donde otros cierran" y que se apoya en "la cercanía y el trato amistoso" como rasgos insustituibles. Recordó que la red de la entidad se extiende por Zamora, León, Valladolid, Ourense y Madrid, "con más de un centenar de puntos de atención" que arropan el territorio y acompañan a agricultores, ganaderos, cooperativas y autónomos. "Nuestra presencia no es solo física: es emocional, es compromiso, es confianza", añadió.

Con esa base, emplazó a que la futura PAC "valore la producción sostenible y reconozca el esfuerzo de quienes, día tras día, cuidan del campo y alimentan al país". La transición, advirtió, debe conciliar objetivos verdes y caja de las explotaciones: "Sostenibilidad, sin asfixiar la rentabilidad". De ahí su defensa de una política que "acompañe a los profesionales del sector" y de un ecosistema que sume financiación responsable, asesoramiento técnico, innovación y arraigo: "El desarrollo rural no se sostiene solo con ayudas". En esa línea, citó la colaboración de la entidad en modernización de explotaciones, incorporación de jóvenes, ahorro energético y digitalización del campo.

García quiso también enmarcar la discusión en una idea identitaria que conectó con el carácter del territorio: "Lo rural no es el pasado: es el presente y el futuro de nuestra tierra". Cada hectárea cultivada, cada explotación ganadera y "cada oficina rural abierta" son, explicó, piezas de una misma estrategia: "Mantener viva Castilla y León". Y remató con una declaración de principios: "Nos sentimos orgullosos de ser rurales, de ser la banca local de Castilla y León, de estar donde otros no están, y de seguir trabajando por una comunidad viva, cohesionada y próspera".

El director general de Caja Rural de Zamora concluyó su bienvenida con un propósito compartido para la jornada: "Que sirva para escuchar, debatir y sumar esfuerzos, porque el futuro del campo es el futuro de todos". Una puerta de entrada que colocó el foco del debate en la estabilidad regulatoria, el reequilibrio entre metas ambientales y márgenes, y la urgencia de acelerar el relevo generacional con herramientas financieras y normativas que no dejen a nadie atrás en el mapa agrario de Castilla y León.