El 'Plan Mahou' para resucitar bares de pueblo

«Si existen bares, existirán pueblos y existirán relaciones sociales entre personas» afirma Alejandro Arranz, Open Innovation & Technologies Director de Mahou San Miguel, portavoz de la iniciativa «BarLab Rural».

La empresa Mahou San Miguel, compañía de bebidas y servicios española con más de 135 años de historia, líder del sector cervecero de España con presencia internacional en más de 70 países que en colaboración con AlmaNatura, una organización centrada en la problemática social, ambiental y económica, han lanzado una iniciativa que apuesta por el emprendimiento rural.

BarLab Rural, con el lema «impulsamos bares, aceleramos oportunidades», es una propuesta que busca revitalizar los bares cerrados de pueblos de menos de 5.000 habitantes de Castilla y León y Castilla-La Mancha. «Es una apuesta por el emprendimiento rural, por la hostelería y por las personas», apunta Alejandro Arranz. Quieren abrir bares para facilitar esa cohesión social y ayudar a crear negocios sostenibles, modernos y con un propósito social.

Además, el programa también busca conectar a esas personas que quieren emprender en un entorno rural con aquellos propietarios de bares que se encuentran cerrados, o en desuso, tanto de titularidad pública o privada, que quieren volver a ver su local en funcionamiento, «con vitalidad», apunta Alejandro. Incluye acompañamiento para los participantes que lo necesiten.

Para ellos los bares en los pueblos son símbolos de identidad colectiva, son el espacio donde la gente se junta para compartir momentos, en estos se construye comunidad. Mahou San Miguel: «Donde hay un bar abierto, hay vida». Para muchos perder el bar del pueblo significa perder un espacio de punto de encuentro y económico relevante en la comunidad.

Con este plan para resucitar bares de pueblo, Mahou San Miguel y AlmaNatura quieren juntar la parte sostenibilidad entorno social, la parte de hostelería y la parte de emprendimiento e innovación. «Para nosotros la iniciativa es una incubadora de proyectos en la hostelería rural», señala el portavoz.

Quieren revertir esta situación de abandono hacia estos establecimientos con la creación de proyectos viables que contribuyan a dinamizar los pueblos.

En Castilla y León hay aproximadamente 2.180 pueblos con menos de 5.000 habitantes, solo 60 cuentan con más habitantes, entre ellos; Palazuelos de Eresma (Segovia), Valverde de la Virgen (León), Zaratán (Valladolid)..., la mayoría de estos son colindantes con la capital de sus provincias. De esos 2.180 pueblos alrededor de 1.640 tienen menos de 500 habitantes y de esos 719 municipios tienen menos de 100.

Por lo que esta iniciativa, promovida por Mahou San Miguel, es una oportunidad para poder regenerar esa vida social y esa faceta económica de los pueblos castellanoleoneses.

AlmaNatura se encarga de gestionar la parte social y de entender qué es lo que quiere y necesita cada municipio, y partirán de ahí para poder trabajarlo. Por otro lado, la empresa líder de cerveza en España se encarga del ámbito más hostelero y de emprendimiento, lo ponen a disposición de todo el mundo para generar un modelo sostenible que puede ayudar a los entornos rurales.

Buscan que el establecimiento que sea abierto por un emprendedor tenga continuidad y que eso se deba al impacto social que produzca en el pueblo. «Para nosotros el bar en el pueblo es un factor muy importante económicamente hablando, y además es el catalizador social muchas veces de las conexiones y de la vida en el pueblo, donde la gente realmente socializa», asevera Alejandro Arranz.

Hay muchos factores que pueden hacer que un pueblo sea elegido para formar parte del programa BarLab Rural, el número de casas rurales que tiene, la cercanía a determinados elementos de distribución, qué rol social tiene..., no sólo ponen en valor la cantidad de habitantes que un municipio tiene, ya puede tener el pueblo 60 habitantes que puede seguir siendo un candidato totalmente válido para ser elegido al igual que cualquier otro.

El equipo se encargará de realizar un análisis interno para identificar las semejanzas entre los que quieren emprender y los propietarios de bares cerrados, cumpliendo así su objetivo de establecer conexiones reales y, sobre todo, viables para poder facilitar la reapertura de un bar, ayudando a su vez a dinamizar la faceta social y económica de estos municipios.

«La viabilidad del bar es lo que va a dar la parte social», afirma. Alejandro comenta que una de las razones por las que los bares no son viables es porque muchas veces no hay gente interesada en tomar las riendas de estos, por falta de conocimientos, por eso hacen hincapié en formar a los emprendedores. Buscan un equilibrio desde la hostelería, desde el emprendimiento para que todo el mundo gane.

«Que el pueblo pueda tener el bar, que al emprendedor le puedan salir los números y que el dueño del local también pueda tener rentabilidad por ese alquiler, ese activo disponible. Lo que buscamos es esa parte que perdure, socialmente hablando, de ese bar» comenta Arranz.

En cuanto a la cantidad de pueblos que podrán ser seleccionados, dependerá de la participación y de la información que obtengan de estos. «Estamos teniendo una muy buena acogida y realmente lo que queremos es hacer lo que sea que hagamos de manera correcta teniendo en cuenta todos los parámetros que pongamos, tenemos que estructurar muy bien esos condicionantes que queremos que se cumplan», asevera el portavoz.

Para poder facilitar la comprensión de cómo hacer de un bar un negocio rentable a los empresarios, estas empresas van a lanzar un acompañamiento a los participantes que consistirá en formaciones online de mentoría grupal sobre las áreas base de la hostelería y contarán con apartados con ámbitos más específicos. Estas incluirán conocimientos sobre sostenibilidad, negocios, hostelería rural, gestión y digitalización.

Proporcionan mentorías individuales y grupales durante varios meses, un acceso a una red de apoyo que centrará su foco en aquellos emprendedores que quieran hacer de su negocio una viable y sostenible, y el diseño de un plan de acción personalizado.

Todas las entidades que pretenden ser acompañantes en el proceso formativo están curtidas de conocimiento rural siendo eficiente su ayuda.

Las formaciones serán ocho sesiones grupales online, en ellas se tratará temas como: gestionar proveedores e inventarios, atraer o fidelizar clientes sin tener que hacer grandes inversiones, cómo llevar unas cuentas claras, entre otros.

«Si alguien tiene muchas formaciones en hostelería y necesita más formación financiera, pondremos más foco en este ámbito, porque no hay dos personas iguales», afirma el Open Innovation & Technologies Director de Mahou San Miguel.

Para inscribirse en esta propuesta, personas que quieran emprender o propietarios de bares en desuso, se puede hacer desde su página web (Barlabrural.com ) hasta el 26 de septiembre. La iniciativa arrancará con una fase de prueba de seis meses para analizar el potencial del apoyo al emprendimiento en la hostelería de pueblos pequeños.

Alejandro Arranz pide que se rellene el formulario con toda la información posible, de su situación personal y profesional, para así ayudarles en el proyecto y también les hace más fácil el proceso de elección. «Para nosotros un bar tiene mucha importancia en los municipios pequeños, es un factor clave», enfatiza.