Valladolid, Burgos y Salamanca encauzan la espera para el especialista frente a la debacle de León y El Bierzo

De León a El Bierzo, de El Bierzo a León. No importa el orden en el que se mire, que las gráficas se definen en ambos hospitales por líneas ascendentes ininterrumpidas desde hace cinco años. Sea en pacientes en espera de sus primeras consultas o en la demora media para su asistencia, el Complejo Asistencial Universitario de León y el Hospital del Bierzo son la gran ‘mancha’ en los datos de la Consejería de Sanidad, adoptando un ritmo contrario a la tendencia de los grandes centros hospitalarios de Castilla y León, que adoptan un color verde en sus balances como muestra de su mejor evolución, como el Complejo Asistencial de Salamanca, que recupera su demora media con la que cerró el año 2019 (84) con un único día de diferencia respecto a los últimos datos de marzo de 2025 (85); o el Clínico de Valladolid, donde llega a disminuir 12 días entre ambos periodos.

En los últimos tiempos era Oncología el término que ponía sobre la mesa la situación de El Bierzo, pero la realidad es que son más factores los que reflejan su deficitaria perspectiva. La espera quirúrgica es una de las razones de sus desequilibrios respecto al resto de la Comunidad, con hasta 124 días de demora para una intervención en sus quirófanos. Lejos quedan los 75 días que se registraron en el primer trimestre de 2015, o los 106 del mismo periodo del año 2020. Cifras a las que ni siquiera se ha acercado en los siguientes años, ni con cambio de gerencia incluido.

Si disponibilidad de quirófanos es una de cuestiones que marca la correcta operatividad del sistema sanitario, otro punto a tener en cuenta -y que suele recibir menos atención- es el tiempo medio que tarda un paciente para acudir a un especialista. Y en el caso del Bierzo, la situación no es tampoco halagüeña, con hasta 139 días de demora media según los últimos datos disponibles de la Consejería de Sanidad. De hecho, es el peor primer trimestre registrado en el complejo berciano desde 2023, cuando obtuvo 159 días de espera, la más alta de toda Castilla y León, mientras que en el presente año se erige como el segundo peor, solo por detrás del Complejo Asistencial de Zamora, que presenta 140 días de demora. Por el contrario, el resto de los complejos principales de la región no atisban de cerca esas cifras, como se demuestra con los 44 días registrados en el Hospital Clínico Universitario de Valladolid, 53 en el Río Hortega de Valladolid, 84 en el Complejo Asistencial de Salamanca, y 72 en el de León.

La tesitura de su ‘vecino’ tampoco es algo que celebrar en el sector sanitario pese a tener la mitad de espera en consultas externas que en El Bierzo. Esos 72 días registrados en el Complejo Asistencial Universitario de León vienen a ser sus peores cifras en un primer trimestre en el historial disponible de Sacyl. Ni siquiera en la época pandémica, cuando el tiempo medio de espera se fijó en 53 días desde su inicio (primer trimestre de 2020) y en 69 en el tercer trimestre de 2023, tras la declaración del fin de la crisis sanitaria por el Covid-19 por el Consejo de Ministros el 4 de julio de ese año. Y si la comparación se realiza con el cierre del año 2019, los últimos meses antes del caos sanitario, la situación empeora en mayor medida, con hasta 26 días de diferencia respecto a los tres primeros meses de 2025.

En esta comparación evolutiva también sale derrotado el Hospital del Bierzo al seguir en una espiral pandémica de más de cuatro meses de espera para el especialista. Una debacle que se refleja desde los mismos datos, con 54 días de diferencia a partir de 2019, cuando registró 85 en su último trimestre. Es más, esa cifra no era ni la más alta entre los grandes hospitales de la Comunidad ya que el Complejo Asistencial de Salamanca igualaba ese número y el de Burgos lo superaba en dos días. Ambos centros hospitalarios también sufrieron repuntes en sus listas de espera durante la pandemia, no obstante, han conseguido estabilizarlas hasta el punto de mejorar sus datos al comienzo de 2025, como es en el caso de Salamanca con una jornada menos registrada frente al primer trimestre de 2019, y cerca de lograrse la misma rebaja en Burgos, que suma únicamente tres días entre ambas fechas.

No solo Salamanca y Burgos encauzan su espera en las primeras consultas para el especialista, sino también los dos principales hospitales de Valladolid. El Clínico, que acostumbra en los últimos años a presentar el menor colapso, no era el centro con mejor demora cuando finalizó el año 2019, ya que sus 46 días de espera media eran rebajados por el Hospital de León (47), el Río Hortega (50), Medina del Campo (16), y los complejos de Ávila (34), Segovia (43) y Palencia (50). En cambio, en esos más de cinco años transcurridos tiene la mejor evolución entre los grandes hospitales de Castilla y León, logrando haber rebajado en 12 días la demora frente al cierre de 2019.

El Río Hortega, el otro hospital de la capital vallisoletana, también encarrila sus consultas externas a los niveles prepandemia, con 53 días registrados en el primer trimestre de 2025 frente a los 50 del cierre de 2019.

Sin León y El Bierzo, la tendencia en los grandes hospitales regionales reflejan una reducción común para acudir al especialista. Por el contrario, en complejos de menor tamaño la situación gira a contracorriente por un aumento generalizando que solo ‘salva’ Soria, con 31 días de disminución. Así, entre 2019 y 2025 las estadísticas muestra un aumento de 69 días en el Complejo Asistencial de Zamora, seguido de 43 en el Hospital de Medina del Campo; de 34 en el Hospital Santiago Apóstol, en Miranda de Ebro; de 33 en el Hospital Santos Reyes, en Aranda de Duero; de 21 en el Complejo Asistencial de Ávila; de 5 en el de Segovia, y de 3 en el de Palencia.

MÁS PACIENTES

Por lo que refiere a los pacientes en espera, también las líneas de León y El Bierzo se despegan de las gráficas sanitarias por un mayor ritmo en su incremento. Porque si de 2019 a 2025 son 64.119 las personas que se han sumado a la espera para tener su primera consulta con el especialista, un 56% corresponden a pacientes adscritos a los dos hospitales de la provincia leonesa, con 19.914 más en El Bierzo y 16.175 en el Complejo Asistencial de León.

Si la espera quirúrgica y de consultas externas son el reflejo de la debacle sanitaria que persiste en León y El Bierzo, su deficitaria situación también se extrapola a las pruebas diagnóstico-terapéuticas, tan comunes como relevantes para determinar si un medicamento o tratamiento específico es eficaz para un paciente. Por ejemplo, para un TAC el tiempo que tiene esperar un paciente para someterse a estar prueba en El Bierzo es de más de un mes, con 34 días de demora. Esta cifra supone la más alta registrada en los primeros trimestres de cada año desde el año 2020, cuando la estadística se espera hasta los 190 jornadas, coincidiendo con el inicio de la pandemia. No obstante, tres meses antes la espera también se situaba en términos altos, con 137 días.

En cuanto al Hospital de León, los enfermos no reciben la llamada antes de 313 días tras haber solicitado un TAC, el tiempo de espera más alto de Castilla y León. Pero hace cinco años no era así, cuando solo el Clínico de Valladolid (35) y el Complejo Asistencial de Salamanca (32) registraban una demora menor que el centro hospitalario leonés, con 45 días.

Entre otras pruebas diagnósticas, las resonancias magnéticas sí que reflejan una evolución positiva en El Bierzo, ya que desciende la espera de 137 días al cierre de 2019 a 51 en los primeros tres meses de 2025, el tercer dato más bajo de toda Castilla y León, únicamente superado por el Río Hortega, con 40 días, y el Complejo Asistencial de Soria, con 25. En León, en cambio, la demora se revierte tras acumular 78 días de media en el cuarto trimestre de 2019 a 258 en el primero de 2025, la mayor cifra de la Comunidad.

Por ecografías, El Bierzo consigue recuperar 51 días en el tiempo de espera, aunque acumula hasta 133 días de espera que solo son superados por Salamanca, con 251, y Palencia, con 257. En lo que refiere a León, se mantiene prácticamente estable su demora, con 42 días al finalizar 2019 y 43 al comenzar 2025.

Y en mamografías se encuentra la nota positiva para ambos hospitales, logrando reducir 159 y 78 los días de espera para recibir esta prueba, en El Bierzo y León, respectivamente.