Mañueco: "El tiempo de Sánchez se ha acabado"

La carta del presidente del Gobierno en la que anunciaba un periodo de reflexión de cinco días ha ocupado todos los titulares de la política nacional. Un tiempo sin agenda pública de Pedro Sánchez que fue criticado desde las filas del Partido Popular. En la tarde del jueves, el líder del Gobierno de España remitió a través de sus redes sociales este parón para pensar si continúa al frente del Ejecutivo tras la apertura de diligencias por un juez de Madrid ante la denuncia de Manos Limpias por un presunto tráfico de influencias de su mujer, Begoña Gómez. Una decisión que apenas un día después fue reprochada por dos presidentes autonómicos del PP: Alfonso Fernández Mañueco e Isabel Díaz Ayuso.

Los presidentes de Castilla y León y Madrid, se dieron cita en un foro en Valladolid y ambos cargaron duramente contra el también líder del Partido Socialista. «Su tiempo se ha terminado», sentenció el presidente de la Junta. Fernandéz Mañueco criticó que Sánchez «se coja cuatro días» al estar «agobiado por la corrupción». En esa misma línea, señaló que España necesita un presidente que gobierne con responsabilidad y «no se coja cuatro días cuando las cosas le van mal». Unas declaraciones que encontraron una respuesta pronto desde el PSOE regional: «La oposición de Feijóo y Abascal ha traspasado todos los límietes», señalaron los socialistas en un comunicado. Por su parte, Díaz Ayuso, afirmó que «se encierra» para, desde el lunes, «triturar a los jueces, a la oposición y a los medios de comunicación» que no son afines al PSOE.

La presidenta madrileña tachó de «carta infame» la misiva que Sánchez remitió a la ciudadanía a través de X, antes Twitter. Señaló que el texto se encuentra entre «el sentimentalismo y el chavismo en un ataque emocional a su gente». A renglón seguido rechazó ese «víctimismo» y apuntó que los españoles están entre «la mofa, la responsabilidad y la angustia». Ayuso señaló que con esta misiva y en estas circunstancias, Sánchez «se escaquea del control» y deja «el desgobierno al escapar de sus responsabilidades para poner en la diana a la justicia» y, en lugar de dar explicaciones, «hace una carta alegal y nos deja en un limbo constitucional para que cualquier cosa sea posible. ¿En qué supuesto constitucional nos encontramos? ¿Dónde nos lleva esta locura?», señaló tras preguntarse si con esta acción «amenaza» la independencia del Poder Judicial. El presidente de la Junta de Castilla y León también cuestionó en qué lugar quedarán las instituciones del país tras su paso: «El tiempo de Sánchez ha terminado el daño reputacional que se ha hecho a nuestro país es gravísimo», sostuvo según las declaraciones recogidas por Ical.

«Su carta es impresentable, nos deja en un vacío de poder», criticó la presidenta madrileña que comparó la decisión con el sector privado, se preguntó qué sucedería si un directivo de una empresa deja su trabajo por unos días porque «se investiga a su mujer». «Un gobernante está para dar seguridad jurídica», sostuvo, algo que a su juicio no hace Pedro Sánchez en estos días.

Isabel Díaz Ayuso dijo que se hizo eco de esta carta en suelo vallisoletano. El primer pensamiento que se le pasó por la cabeza fue que el texto «llevaba un truco» y consideró que busca «victimizarse» entre su gente. Afirmó que empezó a «sentir estupor y preocupación» en una «política de tierra quemada». Posteriormente, después de un «estupor inicial», señaló que se está preparando para «la performance» del presidente del Gobierno del lunes cuando anunciará su decisión a la ciudadanía y a los medios de comunicación en una rueda de prensa.

Bajo esta misma argumentación, pidió no entrar en «las provocaciones ni el agravio ni en la polarización» y anunció que el próximo lunes 29 pretende «cercar» a sus rivales políticos y a los medios que le son «incómodos». «Creo que no debería seguir ni un minuto más por el daño que está causando a España», aseguró para después recalcar que «ha dividido» al Congreso de los Diputados, al Senado, a la justicia y a la prensa.

«El Gobierno está en manos de un hombre obsesionado con el poder», lamentó Díaz Ayuso. A mayores señaló que su proyecto político «nación acabado» y que el fin de Sánchez es «sobrevivir». Un objetivo que, según la presidenta madrileña, provocará que «eche más gasolina».

La número uno de la Comunidad de Madrid sacó a colación las informaciones y presiones que se han ido vertiendo sobre su familia: «Sus cinco semanas a mis cinco años no tienen nada que ver». La ‘popular’ apuntó que lleva un lustro recibiendo «todo tipo de ataques posibles y personales para que se arrugara» y afirmó que se han extendido hasta sus familiares: «Se ha tejido una trama».

En este sentido, rechazó el victimismo y aseguró que ella está comprometida con lo que hace y que tiene «una responsabilidad con España», desde la presidencia de la Comunidad de Madrid. «España entera se pregunta qué va a pasar ahora y en manos de quién estamos», señaló y ensalzó el papel entre vecinos como es el caso de Castilla y León y Madrid: «Ese es el espíritu de las autonomías, y no crear terruños de presuntas identidades».

En otro orden de asuntos, tachó de «nefasto» para España la subida de EH BILDU en las elecciones del País Vasco. En relación a las siguientes elecciones, las catalanas, se mostró convencida de que ya hay un pacto entre Salvador Illa, candidato socialista y los socios independentistas del Gobierno.

"Rincón de pensar"

Horas después de las declaraciones del número uno del Ejecutivo regional, el portavoz de la Junta compartió la valoración de Fernández Mañueco. A mayores, Carlos Fernánez Carriedo sostuvo en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno que la ciudadanía pide "un Gobierno que esté atento a sus problemas, un Gobierno que ponga el interés de las personas delante de los intereses personales". "No estamos en el rincón de pensar, estamos en el rincón de solucionar los problemas", señaló. 

En esa misma línea apuntó que en estos tiempos las comunidades autónomas cobran un papel importante al "ofrecer responsabilidad, estabilidad y confianza". Por ello, adelantó que el Mañueco acudirá este viernes a una reunión con empresarios "para fortalecer intercambios comerciales y atraer inversiones". "Estamos para trabajar pensando siempre en las personas de Castilla y León", afirmó. 

"Estos cinco días mientras algunos están en el rincón de pensar, nosotros estamos con los problemas de la gente", sostuvo. "No estamos para reflexionar en nuestros problemas como ciudadanos, primero son los problemas de la gente de Castilla y León", apuntó Carriedo tras criticar la decisión de Pedro Sánchez. "Ante la inquietud de cual puede ser el futuro, aquí está la Junta, lo que nos corresponde es dar estabilidad, confianza, a atraer inversiones y seguir trabajando", reiteró.

Inaudito

El alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, fue otro de los dirigentes del PP que mostró su opinión sobre el tiempo de reflexión del presidente del Gobierno. El regidor se mostró «asombrado» por la decisión tomada por Pedro Sánchez al asegurar que es «inaudito» que se tome cinco días para reflexionar, que «se supone que se va a meter al cuarto oscuro a pensar».

Sea cual sea la decisión que adopte, el señor Sánchez debe «trabajar y reflexionar» para evitar que «España se deshilache», aclaró. «Si continua que sea para que España siga siendo el gran país que ha sido hasta ahora y si, por el contrario, no continúa, él sabrá los motivos por los que lo hace. Pero que deje de deshilachar a este gran país, porque España y los españoles no nos merecemos este momento que estamos viviendo», afirmó.

Carnero subrayó que los ciudadanos «lucharon y trabajaron mucho en la transición para hacer de España una grandísima democracia», con la Constitución de 1978, y ese es el marco en el que «nos debemos mover todos y cada uno de los españoles». «Es el lugar de encuentro y los demás son los descartes y lo que yo quiero son encuentros en un país fuerte», puntualizó.

El primer edil vallisoletano dejó claro que el Partido Popular es un partido político que forma parte de la oposición, quien ejerce su labor con «lealtad y en defensa de los intereses de España», quien trasladó desconocer si se ha traspasado una línea roja al introducir a la esposa del presidente del Gobierno, al añadir que son cuestiones que atañen al ámbito judicial.