Cervera se viste de fiesta por el Día de la Provincia de Palencia

El repicar de las campanas marcó el inicio de la fiesta. Su sonido, reconocido por la Unesco como patrimonio cultural inmaterial de la humanidad e intensificado en este caso por el eco de las montañas, despertó a un municipio engalanado para la ocasión. Cervera de Pisuerga fue este año la localidad elegida para acoger los actos populares del XXXVIII Día de la Provincia y desde primera hora de la mañana, sus empedradas y porticadas calles eran un continuo ir y venir de visitantes. Hasta ocho autobuses llegaron cargados de gente que, en muchos casos, desconocía los ocultos tesoros de la montaña palentina y que este domingo quedaron al descubierto al ritmo de un toque de campanas con sello palentino a manos de la Asociación de Campaneros Villaltanos de Villota del Páramo.

Su sonido fue el encargado de dar paso a otra de las tradiciones más extendidas en la zona norte. La tradicional pendonada estuvo encabezada además, por el propio alcalde del municipio cerverano, Jorge Ibáñez. “Las primeras pendonadas tienen un origen muy antiguo y siempre es un honor llevar el símbolo de tu pueblo” , aseguró al tiempo que mostró su satisfacción por ver las calles del municipio a rebosar de gente. “Es como volver al verano con la salvedad de que hoy la mayor parte de la gente que nos acompaña es de Palencia y muchos de ellos, nunca habían venido y lo de hoy es una forma también de darlo a conocer”.

A esa oportunidad de promoción se refirió también la presidenta de la Diputación, Ángeles Armisén. “Es el día de sentirnos todos un poco más palentinos. De estar orgullos de serlo y orgullosos de nuestro patrimonio, de nuestros paisajes y de nuestra costumbres”, remarcó.

Para Armisén, la celebración del Día de la Provincia es la oportunidad perfecta, dijo, de llenar cada rincón de sentimiento palentino y expresó su deseo de que “no se acabe en el día de hoy”. “Que ser palentino sea todos los días”, pidió. “El de hoy es un día de orgullo y para hacer provincia” , añadió Francisco Pérez, diputado de Desarrollo Económico, Turismo y Deportes de la Institución Provincial.

Una opinión que comparten Pedro López y María Jesús Lozano. Un matrimonio del Cerrato que decidió madrugar para viajar hasta Cervera de Pisuerga a disfrutar de un día “muy palentino”. “A veces solo tenemos que creernos todo lo que tenemos y defenderlo cuando viajamos fuera”, reconocieron. 

La pareja llegó con la intención de no perderse ni una sola de las actividades programadas como, por ejemplo, la Muestra de Alimentos de Palencia donde además de abrir el apetito se pudo disfrutar de la música de los Dulzaineros de Campos o los Marceros de Cervera de Pisuerga, auténtica seña de identidad del territorio y la tradición popular.

Ya desde ese momento, se quiso dejar patente la unión y la hermandad entre Palencia y Cantabria a través del Camino Lebaniego, principal protagonista este año del Día de la Provincia. “Hay un punto de unión y hay tradiciones compartidas” , explicó Ibáñez. Es por eso, que desde la Diputación se decidió contar con la actuación del cantautor cántabro, Nando Agüeros, que ofreció un concierto para celebrar su 25 años de música. El cantante de Torrelavega repasó los temas más emblemáticos de su carrera como ‘Viento del Norte’, canción convertida en el auténtico himno de Cantabria por el apoyo y reconocimiento del público, tal y como recoció hace unos días el propio artista, informa Ical.

Además de demostrar esa conexión entre ambos territorios, el Día de la Provincia quiso convertirse en le mejor escaparate para el Camino Lebaniego ahora que la celebración del Año Jubilar convierte en una experiencia aún más especial la peregrinación por sus senderos. “Hay un stand donde se se promociona el Camino Lebaniego y donde se regala una credencial de edición limitada que se ha hecho de forma especial para el día de hoy”, explicó la responsable del área de Cultura de la Diputación, Carolina Valbuena.

La programación estuvo completada con una comida popular a base cocido lebaniego, pasacalles, teatro de calle, actividades o talleres para los más pequeños de la casa.