Las Cortes de Castilla y León rechazan la "humillante" reforma del Código Penal para suprimir el delito de sedición
Ibáñez cuestiona que los socialistas se presenten como “españolazos” si aceptan esta reforma penal y Tudanca asegura que prefiere la “paz” y la “convivencia”
El pleno de las Cortes de Castilla y León expresó hoy, con los votos de PP, Vox, Ciudadanos y Por Ávila, su rechazo a la reforma del Código Penal para suprimir el delito de sedición y convertirlo en uno de “desórdenes públicos” agravados por ser una “humillación” y “desvergüenza”, con la oposición de PSOE y Unidas Podemos, que rechazaron esta estrategia de “odio” y “crispación”, que advirtieron puede tener consecuencias en la convivencia.
Así, la proposición no de ley del Grupo Popular insta a la Junta a dirigirse al Congreso de los Diputados para que conozca la voluntad de la Cortes con el fin de que se retire de forma inmediata la proposición de ley de PSOE y Unidas Podemos. Además, en un segundo punto, pide a la Junta que requiera al Gobierno y a los grupos de la cámara baja el debe de cumplir, acatar y respetar la Constitución, en la que recuerdan no tienen cabida ni la sedición, ni los referéndum ilegales.
En una votación por separado, el primer punto, relativo a la iniciativa para derogar el tipo penal de la sedición contó con los votos de PP, Vox, Ciudadanos, Por Ávila, la abstención de UPL-Soria YA y la oposición de PSOE y Unidas Podemos, mientras en el segundo, que recogía el derecho de naciones y regiones a ser una autonomía, fue respaldado por la UPL-Soria YA.
El viceportavoz del Grupo Popular, Ángel Ibáñez, denunció que la derogación del delito de sedición supondrá un “verdadero debilitamiento de las instituciones y del estado de derecho” y criticó que la proposición de ley de PSOE y Unidas Podemos en el Congreso de los Diputados es una corrección a los tribunales y una “cesión” ante el “chantaje” de la negociación de los Presupuestos Generales del Estado para 2023.
Ibáñez señaló que esta iniciativa legislativa no cuenta con el respaldo de una “gran mayoría aplastante” de españoles, porque argumentó que es “inaudito” que el Código Penal se reforme para beneficiar a quien incumple la ley “con nombres y apellidos”. Insistió en que es un “pago en especie” al independentismo, lo que añadió supone romper la “igualdad” y es una “desvergüenza”, informa Ical.
Por ello, el ‘popular’ cuestionó que los socialistas se reivindiquen como “españolazos” por las siglas de su partido, mientras aceptan esta “humillación”. “Sánchez ha demostrado no seguir la tradición democrática del PSOE”, dijo para criticar a continuación a los dirigentes de Castilla y León.
Paz y convivencia
En este debate tomó la palabra el portavoz del Grupo Socialista, Luis Tudanca, aunque estaba previsto que lo hiciera Patricia Gómez Urbán. Este aseguró que quiere a su país y prefiere la “convivencia” y la “paz” más que todo el “odio” junto de quienes están detrás de la “crispación” y el “señalamiento” a los diputados socialistas. De hecho, instó a los ‘populares’ y Vox a que si pretenden hacerlo con alguno de sus compañeros, lo hagan con él, que es capaz de “aguantar la mitad”.
Además, invitó a la reflexión de las consecuencias que puede generar esta estrategia porque si un día se traspasa una línea, todos se arrepentirán. Así, consideró que la iniciativa del PP busca dividir a su partido pero recalcó que solo hay un PSOE y que no lo van a conseguir. También, denunció que quieren enfrentar a los españoles cuando no gobiernan porque prefieren una “España rota, que una España gobernada por otros” .
Tudanca también aprovechó para recordar que fue a un gobierno del PP y con el delito de sedición en vigor al que le convocaron en Cataluña dos referéndum ilegales, le declararon la independencia de esta comunidad y se le fugó el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont.
Sánchez, “traidor”
El parlamentario de Vox David Hierro llamó “traidor” al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y aseguró que pasará al “rincón oscuro” de la historia junto a Fernando VII por su alianza con Napoleón o el expresidente de la Generalitat Lluís Companys, a quien acusó de presumir de haber promovido el asesinato de más de 8.000 católicos por su religión. “Estamos ante un acto de extrema gravedad y extrema traición”, dijo y señaló que los socialistas se han mimetizado con sus socios para mantenerse en La Moncloa.
Además, Hierro, que planteó una enmienda no aceptada, advirtió al PP que no hay un PSOE “bueno” y otro “malo”, sino un solo Partido Socialista, ya que negó la existencia del Felipismo, el Zapaterismo o el Sanchismo. Por ello, dudó de que puedan entenderse en el futuro con otro PSOE y señaló que Vox mantendrá su “distancia infinita” con esta formación porque son “conscientes del mal” que han hecho a España.
1936 y Región Leonesa
En nombre de Unidas Podemos, Pablo Fernández argumentó que el delito de sedición es “anacrónico”, una “anomalía preconstitucional”, que a su juicio no debería aplicarse en el siglo XXI porque ni siquiera se ajusta a los estándares europeos. Además, afeó al PP que presente esta iniciativa cuando gobierna con un partido como Vox, que aseguró defiende la sedición que se cometió en 1936 o niega la violencia de género y cuando no cumple el mandato constitucional. “Ustedes son al cumplimiento de la Constitución, lo que Pablo Motos al feminismo”, sentenció.
El procurador de Ciudadanos, Francisco Igea, se mostró en contra de la rebaja de penas a la sedición, pero preguntó si era la de 2017 o la de 1936, porque en las Cortes se sientan procuradores de Vox que el domingo convocaron una manifestación para hacer lo mismo que hicieron sus “abuelos”, sobre los que preguntó si eran “sediciosos” los promotores del golpe militar en la segunda República. Así, advirtió a los socialistas de que no se deberían derogar ante lo que pueda suceder y señaló que beneficia a los poderosos.
Finalmente, el ‘leonesista’ José Ramón García, del Grupo UPL-Soria YA, señaló que la iniciativa solo busca un “titular” o una “postura no vinculante”, aunque señaló que la reforma del delito de sedición se hace con “prisas” y de un “modo chapucero” para aprobar los apoyos a los Presupuestos Generales del Estado para 2023. Además, aprovechó para recriminar a PP y PSOE su oposición a la creación de la autonomía leonesa.