Greenpeace denuncia "chanchullos" en las subvenciones encubiertas a los aeropuertos de León y Burgos
Contabilizan que entre los años 2018 y 2022 ambas infraestructuras han recibido dinero público por un importe superior a los siete millones de euros
La organización ecologista Greenpeace ha publicado un informe en el que denuncia "chanchullos" en las subvenciones a su juicio encubiertas que se entregan a diferentes aeropuertos de todo el país. En el caso de Castilla y León, el informe de la agrupación titulado 'Chanchullos en el aire', indica que los dos únicos aeropuertos de la región beneficiarios de estos importes son el de Burgos-Villafría y el de León , algo que también critican dada la emergencia climática presente a nivel mundial.
Precisamente, Greenpeace señala que el aeropuerto de Burgos-Villafría recibe subvenciones a través del Consorcio del Aeropuerto de Burgos, integrado por el Ayuntamiento de la ciudad y la Diputación provincial. A pesar de esto, el informe remarca que "las cifras de pasaje son muy bajas y no se consigue mantener la regularidad de las rutas" . Inciden también en que "en 2021 el Ayuntamiento suspende las ayudas a Air Nostrum y busca nuevas compañías, para las que prevé partida presupuestaria", a lo que incorporan unas declaraciones del alcalde negándose a "ser el primer que cierre un aeropuerto".
"Ahora ya no se incide en el aeropuerto como motor de desarrollo" , prosigue el informe, "sino en el servicio a los ciudadanos para conectar con otras regiones". Además, concluye que "a fecha de 2022 el aeropuerto de Burgos carece de vuelos regulares programados".
Greenpeace incide en que en el caso de Burgos, el aeropuerto de Villafría ha mantenido una fórmula similar abonando 1,2 millones al año a través de Sociedad para la Promoción y Desarrollo de la Ciudad de Burgos S.A. (Promueve Burgos) para mantener su conexión con Barcelona . No obstante, este acuerdo no ha tenido continuidad por las bajas cifras de demanda.
Por otro lado, y en lo que respecta al aeropuerto de León, desde Greenpeace aseguran que "recibe subvenciones para líneas aéreas a través del Consorcio para la Gestión de la Promoción del Aeropuerto de León", si bien no especifican más al respecto. Aún así, en 2020 tanto Ayuntamiento como Diputación aprobaron una subvención superior a los 400.000 para los vuelos que Air Nostrum operaba desde el aeródromo leonés.
Junto a esto, y a finales de ese mismo año, las previsiones que se manejaban para el aeropuerto de León de cara a 2021 superaban lo 1,4 millones de euros.
Por tanto, desde la organización ecologista señalan directamente a los aeropuertos de Burgos y León como los que se benefician de subvenciones públicas en Castilla y León, dejando fuera de este grupo a los dos restantes, Salamanca y Valladolid. Es más, contabilizan que entre los años 2018 y 2022 ambas infraestructuras han recibido dinero público por un importe superior a los siete millones de euros destinados a diferentes compañías aéreas.
De hecho, y sobre el aeródromo salmantino, Greenpeace apunta que "recupera algo de actividad en 2017, sin que se hayan encontrado indicios de subvenciones" . Tomando como fuente artículos publicados en prensa, añaden que "en 2019 no recibe subvenciones", al tiempo que apuntan que "estas mejoras provienen de una gestión más eficaz que incluye una escuela de pilotos, vuelos charter para programas de vacaciones de personas mayores, base para aviones de extinción de incendios y mantenimiento de aeronaves".
Finalmente, y sobre el aeropuerto de Valladolid-Villanubla, Greenpeace reconoce que "no parece recibir subvenciones" . "Es el único que en 2019 alcanza cifras de pasajeros superiores a 100.000, el mínimo fijado por la UE para garantizar la viabilidad de un aeropuerto comercial", añaden.
Dentro de este informe, una una valoración más general, desde Greenpeace consideran que existe una gran competitividad entre los distintos aeropuertos de Castilla y León. "Además del tradicional pulso Valladolid-León, cada provincia con aeropuerto parece haber convertido el conservar operativa esa infraestructura en una cuestión de identidad provincial, concentrando cuatro aeropuertos diferentes a menos de 150 kilómetros desde Valladolid, que funciona como aeropuerto principal".
Por último, la agrupación ecologista también indica que "no se encuentran ayudas de la Junta, pues en general provienen en exclusiva de ayuntamientos y diputaciones". Al respecto, dan como fecha de suspensión de las mismas el año 2016, si bien este tipo de aportaciones se interrumpieron algunos años antes.