EXPLOTACIÓN SEXUAL
Cae un grupo criminal en Salamanca por explotar sexualmente a mujeres
Las víctimas, de origen latinoamericano, eran captadas para trabajar en España mediante falsas promesas de mejora económica ofrecidas en una red social

Imagen de archivo de un agente de la Policía Nacional junto a dos vehículos.
Cae un grupo criminal dedicado a la trata para la explotación sexual en pisos de Salamanca. La Policía Nacional ha desarticulado a una organización criminal integrada por 12 personas, ahora ya detenidas, de las cuáles seis ya se encuentran en prisión preventiva, que se dedicaba a la trata de mujeres en pisos prostíbulos ubicados en toda la provincia salmantina. Así lo ha confirmado la Dirección General de la Policía en una nota de prensa remitida a los medios.
Las víctimas, que se cuentan por 17, son de origen latinoamericano y fueron captadas para trabajar en España mediante falsas promesas de mejora económica ofrecidas en una red social. Se les sometía a un control estricto y eran obligadas a ejercer la prostitución las 24 horas del día los siete días de la semana y a consumir sustancias estupefacientes.
La investigación comenzó tras una denuncia recibida en el correo electrónico trata@policia.es, que junto a la línea telefónica 900 105 090, facilita la colaboración ciudadana y la denuncia, anónima y confidencial de los delitos relacionados con la trata de personas. Tras realizar las correspondientes pesquisas, se logró confirmar la existencia de una organización criminal, asentada principalmente en Salamanca, que aprovechándose de la situación de necesidad y vulnerabilidad de las víctimas, las sometía a explotación sexual en pisos prostíbulo.

Salamanca
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Diario de Castilla y León | El Mundo
El entramado del grupo estaba jerarquizado y con un claro reparto de roles. Contactaban con las víctimas a través de una red social en la que ofertaban falsos puestos de trabajo en nuestro país para mejorar así su futuro y poder ayudar a sus familiares. Una vez que las víctimas se encontraban en España se les retiraba su documentación, y en vez de denunciar su situación ante las autoridades, se veían obligadas a ejercer la prostitución por el miedo derivado de su estancia irregular y hacia la organización.
Las mujeres eran repartidas en los distintos pisos que la red disponía para sus fines, donde se les informaba de las condiciones de trabajo, teniendo que estar disponibles las veinticuatro horas del día los siete días de las semana y siendo obligadas al consumo de sustancias estupefacientes. Por los servicios prestados obtenían solo el 50% de los beneficios generados, estando sujetas a un sistema de multas en el caso de incumplir las normas impuestas por el entramado. Además eran sometidas a un estricto control, tendiendo que permanecer en el interior de los pisos, con salidas limitadas al exterior y viviendo en condiciones infrahumanas.
Asimismo, la investigación sacó a relucir el resto de actividades delictivas llevadas a cabo por los encargados de los domicilios en los que se ejercía coactivamente la prostitución, entre ellos delitos relacionados contra la salud pública, especialmente, el tráfico de sustancias estupefacientes. Las víctimas estaban obligadas a su consumo y a los clientes se les facilitaba si así lo demandaban.
Durante el desarrollo de la operación, se ha llevado a cabo la entrada y registro simultáneo de cinco inmuebles y casas de citas en la provincia de Salamanca en los que se detuvo a 12 miembros de la organización criminal, y se intervinieron 21.000 euros en efectivo, 51 gramos de cocaína, datafonos utilizados para el pago de los servicios sexuales y una abundante documentación relacionada con la investigación.