Salamanca dice adiós a un Palacete

El Palacete neobarroco situado en el número 36 de la avenida Italia de la capital salmantina ha finalizado su demolición, después de que en las semanas previas se haya llevado a cabo la retirada de residuos peligrosos, así como elementos de amianto.

En el futuro, se construirán seis viviendas y un garaje al no poder salvar la estructura original, que ha sufrido un deterioro imparable en los últimos 30 años. Datado en 1926 y obra de Luis Vega, "por su carácter histórico, el PGOU había conferido al edificio una protección estructural, por lo que en la nueva construcción se conservará la estructura original, se mantendrán las fachadas y se repetirán las cubiertas con el fin de respetar los elementos originales.

El palacete, de titularidad privada, comenzó a ser derruido en la mañana del miércoles con una retroexcavadora de cadena con martillo y con todas las medidas de seguridad incluidas en el proyecto de ejecución de la obra, según ha apuntado la empresa encargada de los trabajos, Servicios Punto Viso, en un comunicado recogido por Europa Press.

La empresa salmantina especialista en demolición y derribo de edificios, ha dispuesto un camión pluma PK9000 con una placa de grandes dimensiones para colocarla en los edificios colindantes con el propósito de conseguir la máxima protección para esos inmuebles ante el eventual impacto de algún cascote.

Además, se ha cortado el tráfico en la zona, que ha quedado acordonada para impedir el acceso de personas ajenas a las tareas de demolición. Una vez concluido este miércoles el proceso de demolición, Servicios Punto Viso realizará la gestión del residuo del inmueble así como su posterior retirada con camiones bañera.

Para llevar a cabo toda esta obra, de máxima precisión, Servicios Punto Viso ha realizado un meticuloso estudio del inmueble, así como del entorno, adaptando la maquinaria necesaria a emplear en cada caso. Servicios Punto Viso ha sido la empresa encargada este mismo año de la demolición del edificio que albergó el mítico bar El Tenderete en la calle Van Dyck, la antigua residencia San Juan de Dios en el barrio de Ciudad Jardín o de un edificio en la calle Álvaro Gil en la confluencia con Juan Picornell.