EL RUBICÓN
El Morante de los trenes
Pues ya está. Ya no hay más cera que la que arde. Si es que ya lo había anunciado el alcalde con más luces, de Navidad y en esto de la política, el gran Abel Caballero, el AVE va a dejar de parar en Castilla y León para que llegue más rápido a su Vigo querido.
Atrás quedan las mentiras de Renfe y su presidente, el ínclito Álvaro Fernández Heredia, cuando en aquel comunicado de marzo pasado salía a desmentir al Abel Caballero ‘El Grande’. «No se plantea quitar ninguna parada del recorrido de los trenes de Alta Velocidad que unen esta comunidad con Madrid», decía entonces.
Una gran mentira a la altura del ínclito que dirige los designios de Renfe. El ideólogo del desastre de movilidad viaria de Valladolid en sus tiempos de gente de Auvasa.
Y es que se coge antes a un mentiroso que a un cojo. Ha bastado dejar pasar el tiempo para descubrir la gran mentira de Renfe para con Castilla y León y la gran verdad de Caballero ‘El Grande’.
Diez, no uno ni dos ni tres, ni cuatro. Diez serán los AVE Madrid-Galicia que pasarán de largo allí donde hasta ahora paran en Segovia, Medina del Campo en Valladolid y Sanabria en Zamora. Del «no se plantea quitar ninguna parada» a se van a suprimir diez.
Y para Castilla y León son lentejas. Que, salvo actuación mediante del ministro Óscar Puente, que no se vislumbra, se van a acabar tragando Segovia, Medina y Sanabria. Actuación mediante de Puente a la que parece apelara el nuevo líder del PSOE de Castilla y León llegado de las tierras altas de Soria cuando invoca al punto de vista político para resolver el entuerto.
Me da que llega tarde Carlos Martínez en su invocación a la política. Tanto o más tarde que Renfe en sus explicaciones sobre esas razones técnicas que esgrime ahora para justificar la eliminación de paradas del AVE en la Comunidad. Eso antes, mucho antes incluso de que Abel Caballero ‘El Grande’ saliera a presumir que se iban a eliminar paradas en Castilla y León para que los suyos de Vigo llegaran y volvieran antes de Madrid. Porque ahora señores de Renfe ya no les cree nadie. Y, mucho menos, los castellanos y leoneses, a quienes el Morante de Renfe, el ínclito Fernández Heredia, les acaba de dar una larga cambiada que ya la querría para sí el diestro sevillano. Una faena a Castilla y León que el Morante de Renfe le brinda al alcalde de Vigo y para la que Abel Caballero ‘El Grande’ piensa pedir ya la puerta grande. La faena lo merece, desde luego.