Castilla y León lanza nuevas becas para que 200 jóvenes trabajen aquí al terminar sus estudios superiores

La Junta y las nueve universidades de Castilla y León (cuatro públicas y cinco privadas) han firmado un nuevo protocolo de colaboración para facilitar que 200 jóvenes de titulaciones superiores desarrollen prácticas en empresas de la Comunidad, a través de una próxima convocatoria de becas  con estancias de entre seis y nueve meses , cuyo objetivo es "retener, atraer y retornar el talento" , en palabras del consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, y de la consejera de Educación, Rocío Lucas. 

Ambos han rubricado el acuerdo junto con los rectores de las nueve instituciones académicas, quienes han destacado esta "positiva acción" en aras de "mejorar las oportunidades laborales" de los estudiantes y de permitir que "las empresas se enriquezcan", según ha destacado el rector de la Universidad de Valladolid, Antonio Largo Cabrerizo, quien ha ejercido de portavoz del conjunto de rectores. 

Las nuevas becas, que se convocarán a través del Instituto para la Competitividad Empresarial (ICE), estarán dotadas con 6.480 euros e irán destinadas a estudiantes de posgrado, doctorado, máster o títulos propios  y posibilitarán que los jóvenes tengan su primera experiencia laboral dentro de su territorio, para que después puedan quedarse, bien por cuenta propia o ajena. 

"A veces las empresas piden una experiencia que los jóvenes no tienen al terminar la universidad", ha destacado Carriendo sobre ese "gap" que van a tratar de abordar a través de este programa. "Que los que piensen en irse a otra comunidad autónoma o país, sepan que aquí hay posibilidades interesantes" , añadió Cabrerizo en esta misma línea. 

El primer paso para poner en marcha la iniciativa será contactar con el tejido empresarial de la Comunidad para "identificar" los perfiles que necesitan en sus plantillas en diferentes áreas, entre las que el rector de la Universidad de Valladolid citó la automoción o la agroalimentación. "La clave es diagnosticar necesidades de las empresas y hacerlas compatibles con los intereses de los universitarios".

La consejera de Educación recordó que el nuevo protocolo, con una vigencia de cuatro años, se suma a otras iniciativas centradas en la transferencia del conocimiento , dada la "importancia de conectar" el ámbito empresarial y el universitario "para que los jóvenes se quedan y tengan oportunidades" en Castilla y León.