Cortes Castilla y León: nadie sabe nada

Conocer el reglamento de las Cortes de Castilla y León . Eso es lo mínimo que se le debe exigir a todos y cada uno de los 81 procuradores que se sientan en el parlamento autonómico y ni eso son capaces de hacer, al menos algunos de ellos. Pero parece que las Cortes de Castilla y León es aquel parlamento en el que nadie sabe nada, parafraseando al programa de Andreu Buenafuente y Berto Romero en la Ser, aunque en este caso la situación invita a cualquier cosa menos a la risa.

Y para muestra, el botón de la última Comisión de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural con la sorprendente intervención de una procuradora del PP en la que admite: «No conozco el reglamento» . Reglamento que es el que rige el funcionamiento de la actividad parlamentaria. En un momento del debate de la Proposición No de Ley (PNL) del Partido Socialista sobre la brecha salarial entre hombres y mujeres en el mundo rural y, más concretamente, en el sector agrario, justo cuando el procurador de Ciudadanos, Francisco Igea , había acabado su intervención para fijar la postura de su partido, la procuradora del PP por Ávila María Ángeles Prieto, que era la encargada de defender la postura de los ‘populares’, preguntaba si podía intervenir «por alusiones», porque desconocía el reglamento.

«¿Puedo intervenir por alusiones? Como no conozco el reglamento» , interpelaba María Ángeles Prieto a la presidenta de la Comisión de Agricultura, Susana Suárez Villagrá, que curiosamente, y por extraño que pudiera parecer, desconocía también lo que recoge el reglamento de las Cortes. O, lo que es lo mismo, la máxima autoridad y a quien corresponde dirigir el debate en la Comisión de Agricultura como presidenta, no sabía si la parlamentaria del PP estaba habilitada o no para intervenir, podía o no hacer uso de la palabra «por alusiones».

«Un momento, por favor, un momento», reclamaba la presidenta de la Comisión ante las quejas de los procuradores mientras miraba al letrado, que está allí para dar fe y apoyo a controversias y no para explicarles el reglamento, que evidentemente no se habían mirado, ni la procuradora María Ángeles Prieto ni la presidenta Susana Suárez. «Cualquier procurador de cualquier grupo puede intervenir porque ha habido una modificación de la PNL» , explicaba el letrado, quien a renglón seguido aclaraba: «Se ha preguntado quién quiere intervenir y sólo lo ha pedido el grupo mixto. Alusiones no hay, se ha hablado de las posiciones políticas, no se ha hablado de la dignidad ni del honor de nadie».

Explicación del letrado, ante el desconocimiento del reglamento por parte de María Ángeles Prieto y también de Susana Suárez, que ahora sí interviene para decir que «queda claro que no hay alusiones». «Estamos hablando -continúa- solamente del posicionamiento definitivo» . Pero es que, incluso después de la explicación del letrado, Suárez Villagrá preguntaba si algún grupo quería intervenir y un «ya nada» la cortaba rápidamente. Nada porque, como recoge el reglamento que ni conocen ni se han leído, y les explicaba el letrado, sólo el grupo mixto por medio de Igea había pedido intervenir para fijar posición y no había lugar a hacerlo después por alusiones.

El reglamento es a un procurador lo que el código de la circulación a un conductor. No se puede conducir si no se sabe uno la señales de circulación. Este es el nivel que se está viendo en algunos procuradores de las Cortes de Castilla y León que, conviene recordar, c obran por desempeñar su trabajo , ya sea un sueldo por dedicación exclusiva o, como es el caso de la procuradora del PP, que se embolsa 220 euros limpios por una comisión, la de Agricultura, que duraba menos de una hora.

Comisión en la que, finalmente el PP y Vox rechazaban la PNL del PSOE para que se tomaran medidas para la desaparición de la brecha salarial en el mundo rural porque, a decir de los ‘populares’, ya se están tomando medidas. Precisamente, el cambio de los socialistas en la Proposición había sido el añadir, «para que se sigan tomando medidas».