La Junta cierra el interior de hostelería y los centros comerciales por la alta incidencia
El cierre se aplicará desde las 00.00 horas y durante catorce días en las seis provincias restantes ante el aumento «vertiginoso» de la tasa a siete días, cinco veces superior que en la semana de Navidad
Castilla y León al completo. Las seis provincias restantes cerrarán desde mañana y durante las próximas dos semanas el interior de la hostelería, así como los centros comerciales, los gimnasios y las salas de juego, como ocurrió en el pasado mes de noviembre.
La Junta no ha dudado ante el aumento de los contagios y la incidencia en todo el territorio autonómico y decidió ayer aplicar el conjunto de medidas en Valladolid, Salamanca, León, Burgos, Soria y Zamora, que se suman a Ávila, Palencia y Segovia, con el cierre aplicado desde el pasado domingo.
El gabinete de crisis del Consejo de Gobierno, cuya reunión anunció en la mañana de ayer el presidente Mañueco, anuncia una nueva serie de medidas restrictivas, esta vez, para el conjunto autonómico, motivadas al dispararse la incidencia de los contagios, cinco veces superior a la registrada en la semana de Navidad, según señalan las fuentes de Sanidad consultadas por este periódico.
Las medidas se centran en cuatro sectores: la hostelería cerrará el interior, permitiéndose las terrazas al 75% del aforo, sin posibilidad de habilitar terrazas ‘pecera’, y se podrá continuar con el servicio de recogida y a domicilio; los centros comerciales, entendidos como establecimientos de más de 2.500 metros cuadrados, deberán cerrar sin excepción alguna, no así el comercio minorista; las instalaciones deportivas también se clausuran desde mañana, suspendiéndose la actividad deportiva no oficial ni federada; y los locales de juego .
Este conjunto de restricciones adicionales al nivel 4 de alerta sanitarias se aprobarán hoy en un Consejo de Gobierno extraordinario para «continuar con las políticas de prevención y anticipación»que consigan frenar el avance del coronavirus. Unas medidas ya conocidas, pues son exactas a las que vivió el conjunto de castellanos y leoneses el pasado mes de noviembre, tras el pico de datos Covid que dejó la segunda ola en octubre, y que se alargó hasta el mes de diciembre, cuando se reanudó la actividad en los sectores señalados. El presidente Mañueco afirmó en twitter que «solo desde la seguridad sanitaria» Castilla y León «podrá activar la economía».
En poco más de dos semanas, exactamente las que dura la Navidad, la situación a la que se enfrenta Castilla y León ha dado un vuelco en el peor de los sentidos. El aumento de los contagios y el fuerte crecimiento de la incidencia, así como la tendencia al alza que muestran todas las provincias, avalan el cierre de cada una.
La gran diferencia respecto a los datos ofrecidos ayer es la variación en la presentación de los mismos. La Junta ofrecía cifras diarias pero no reales y, aunque bien contrastadas, esto originaba un decalaje en el número de cinco días. Sin embargo, el Ministerio de Sanidad, con datos ‘no consolidados’, reflejaba la incidencia del contagio real en cada territorio, lo que significa que el dato ofrecido por la Junta es de hace cinco días. Ahora que el portal del Gobierno castellano y leonés se actualiza con cifras del día y, por tanto, reales, las tasas que muestran cada una de las provincias resulta como un jarro de agua fría.
En este contexto, obviando las disparadas incidencias en Ávila, Palencia y Segovia, con el cierre de la hostelería y los centros comerciales aplicado desde el domingo, un aumento que el presidente Mañueco consideró «vertiginoso», Valladolid se presenta como la próxima en adoptar restricciones, aunque no será la única. En el caso vallisoletano, la tasa a siete días se encuentra a 300 casos por cada cien mil habitantes, lo que indica que la incidencia a catorce días, ahora ligeramente superior a 400, ascenderá hasta los 600 casos en cuestión de días.
León y Salamanca registran tasas parejas, tanto a siete como a catorce días. La Junta advirtió que los cierres se aplicarían en el momento de superar una incidencia de 200 casos a siete días, algo que ya ocurre en ambas provincias. En el caso leonés, 250; en el salmantino, 270. Las dos con una progresión al alza que situará su incidencia en jornadas próximas por encima de los 500 a catorce días.
De cualquier modo, las nueve provincias alcanzarán esa tasa en cuestión de una semana. Actualmente, Burgos, territorio que mayor incidencia alcanzó de toda la Comunidad durante la segunda ola, presenta la tasa a siete días más baja a nivel autonómico, de 170. Sin embargo, la tendencia augura un crecimiento que terminará en el cierre de los sectores mencionados. Soria y Zamora, algo por encima sin alcanzar los 200 casos por cada cien mil a siete días, alcanzarán ese rasero marcado por el Ejecutivo autonómico en dos o tres días, dada la tendencia alcista de ambas.
Por otra parte, la actividad en los hospitales de Castilla y León se mantiene estable a pesar del ligero crecimiento que sufre desde la entrada del 2021. Las consecuencias de la Navidad comenzarán a verse en las próximas semanas. Actualmente, los pacientes Covid ingresados ascienden hasta 730, de los cuales 140 se encuentran en las unidades de críticos; justo antes de las fechas navideñas, entre el 20 y 21 de diciembre, la ocupación en hospitales se fijaba entorno a los 700 ingresados, con casi 160 en las UCI. Por ello, se observa un nivel similar, lo que hace pensar que, por el momento, no han llegado los efectos de levantar las restricciones hace unos días.
La media autonómica de ocupación de hospitales en planta se fija en el 64%, con varios hospitales por encima del 70%: el Río Hortega y el Clínico, ambos en Valladolid, el Hospital de Zamora y el Hospital de Salamanca, este último con una ocupación del 78%, el más completo. En cuanto a las UCI, el nivel medio se refleja en torno al 56%, con los dos de Valladolid como centros con menor aforo disponible; el Río Hortega, al 76%, y el Clínico, al 70%.
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