Brutal agresión a un árbitro de cadetes en Burgos: un padre le deja inconsciente de un puñetazo

Un árbitro de unos 50 años ha tenido que ser trasladado al Hospital Universitario de Burgos (HUBU) después de haber sufrido una agresión de un aficionado que le dejó inconsciente. Como consecuencia de la agresión, la víctima, que en un primer momento fue trasladada al Hospital Santos Reyes de Aranda, fue después evacuado al HUBU, al tener un traumatismo craneoencefálico, así como varias fracturas. La Policía Local de Aranda de Duero ha detenido al agresor.

Los hechos se produjeron a media mañana al término de un partido de la categoría cadete que disputaban los equipos Aranda Riber y el Capiscol en las instalaciones Juan Carlos Higuero de Aranda de Duero. El centro de emergencias del 1-1-2 recibía una llamada en la que se informaba de una agresión a una persona, el árbitro, que estaba tendida en el suelo, inconsciente, después de haber recibido al menos un empujón de un aficionado.

El centro de emergencias avisó del incidente a la Policía Local, así como a la Policía Nacional y a Sacyl, que enviaba al lugar una ambulancia. Allí, los sanitarios atendían a la víctima, que era trasladada al Hospital Santos Reyes de Aranda para después ser derivada al HUBU.

Las reacciones a la agresión no se hicieron esperar. El club anfitrión, el Aranda Riber, publicaba un comunicado en el que mostraba su "más profunda indignación y repulsa y manifestamos nuestra más enérgica condena ante el inaceptable incidente ocurrido esta mañana" en el que un aficionado del equipo rival agredió al árbitro del partido.

El club señala que se trata de un "acto deplorable" que "no solo atenta contra la integridad física y emocional de una persona que se encontraba desempeñando su labor con entrega y compromiso". Además "socava los valores fundamentales del deporte, especialmente en el contexto del deporte base, donde se busca inculcar principios de respeto, juego limpio y educación entre los más jóvenes".

Desde el club se expresaba el "más sincero apoyo y ánimo" al árbitro agredido, a la vez que deseaban que su "recuperación se rápida y completa, tanto a nivel físico como emocional para que José Luis pueda contribuir desempeñando su labor con la misma dedicación y pasión que ha demostrado hasta ahora".

El club apela a que "las autoridades deportivas y a las organizaciones responsables para que tomen medidas contundentes y efectivas que garanticen la seguridad de todos los participantes, incluidos los árbitros". Reclama que se "establezcan protocolos claros y estrictos para prevenir y sancionar cualquier tipo de agresión o comportamiento violento en los campos de fútbol".

El Ayuntamiento de Aranda de Duero emitió un comunicado en el que expresa su "más enérgica condena ante la intolerable agresión" al árbitro. Este tipo de actos violento "no tienen cabida en el deporte y mucho menos en el ámbito del deporte base, donde se promueven valores como el respeto, tolerancia, el compañerismo y el juego limpio". Desde el Consistorio muestran su "total apoyo al árbitro agredido y a su familia, a quienes ofrecemos todo nuestro respaldo y deseamos su pronta recuperación". También "respaldaremos al club Aranda Riber si decide emprender acciones legales".

Desde el Ayuntamiento, "queremos que los padres, familiares y amigos que asisten a dichos partidos lo hagan para disfrutar, animar y fomentar un ambiente positivo para nuestros equipos". Se añade que "el deporte debe ser un espacio seguro para todos, dentro y fuera de la pista".