Condenado a 8 años de cárcel por violar a una menor bebida en Aranda
La Audiencia Provincial de Burgos ha condenado a ocho de prisión a C.H.D. por un delito abuso sexual de una menor de 16 años durante las fiestas de Aranda en 2018. Los hechos se remontan al 7 de septiembre de 2018, cuando, sobre las 18.00 horas, cuando la víctima, que entonces tenía 13 años, y cuatro amigas, tres de ellas menores de edad también, fueron a casa de otro amigo, menor de edad también.
Poco después de las diez de la noche llegó otro grupo de chicos a la vivienda, entre los que estaba el acusado, que en aquella época tenía 21 años. Una vez allí estuvieron bebiendo alcohol, en cantidades que no se pudieron concretar. Entre las 21.30 y las 22.00 horas, una de las amigas de la víctima se marchó a la calle, y poco después, en torno a las 23.30 horas, el resto del grupo se fue a la verbena. Estuvieron de fiesta hasta cerca de las 4 de la madrugada.Cuando la víctima y una amiga decidieron volver a la casa, la víctima se dio cuenta de que no tenía llaves de su vivienda, por lo que el condenado les dijo que podían ir a sus casa, ya que no había nadie.
Cuando llegaron a la vivienda del acusado, estuvieron un rato en el salón las dos amigas, el acusado y su primo. Al irse a dormir, la amiga se fue al dormitorio del acusado, que tenía una cama individual, mientas que C.H.D. le dijo a la víctima que podía ir al dormitorio de la madre, que tenía una cama de matrimonio. Allí se acostó vestida y solo se quitó los zapatos, mientras que C.H.D. se acostó a su lado para quedarse poco después en ropa interior.
El acusado, «sabiendo que contaba con menos de 16 años de edad y sin el consentimiento de esta», se fue aproximando, le quitó la ropa de cintura para abajo, se colocó encima y «penetró vía vaginal tres veces» a la víctima, a lo que ella, «estando bajo los efectos de la previa ingesta de bebidas alcohólicas ingeridas a lo largo de la noche», en cantidades sin determinar, no opuso resistencia. A continuación, ella se vistió y se quedó dormida. Días más tarde, el 19 de septiembre. C.H.D. mantuvo una conversación con una amiga de la víctima a través de Instagram en la que le reveló que el día de los hechos había mantenido relaciones sexuales con la víctima, concretando que habían sido tres penetraciones vaginales sin preservativo, por lo que se mostraba preocupado, ante otra de las amigas, por que la víctima pudiera estar embarazada. Tras los reproches de la amiga al acusado, esta mantuvo otra conversación ese día por la tarde con la víctima. Le pregunta si había mantenido relaciones sexuales con C.H.D. y la víctima dijo que no, pero ante su insistencia le contestó que no recordaba nada, que estaba borracha. La amiga le dice que sí han tenido relaciones sexuales y le recomienda que se tome la píldora, ya que podría haberse quedado embarazada.
La víctima mantiene otra conversación por Instagram con el acusado en la que hace referencia a un posible embarazo. Al enterarse la madre, lo denunció.